Lucha contra el déficit

Bélgica cierra 2012 con déficit del 3,9 % por anotarse la inyección en Dexia

El Estado belga ha cerrado el año 2012 con un déficit del 3,9 % por el impacto de la recapitalización del banco francobelga Dexia, frente al 3,7 % del año anterior, confirmó hoy el Banco Nacional de Bélgica tras revisar al alza la cifra.

La transferencia de capital realizada a finales de diciembre por el Estado belga en el marco de la inyección de capital de 2.900 millones de euros en Dexia tuvo un impacto de aproximadamente un 0,8 % del PIB sobre el saldo de las finanzas públicas belgas, indicó el Banco Nacional en un comunicado.

Sin esa inyección de capital, Bélgica hubiera cerrado 2012 con un déficit del 2,9 % del PIB.

A mediados de mes el Comité de estadísticas Monetarias, Financieras y de Balanza de Pagos (CMFB, en sus siglas inglesas) dictaminó que la inyección de capital "tenía las características de una transferencia de capital"y no de una transacción financiera, que no hubiera tenido consecuencias para el déficit belga.

El órgano tomó esta decisión tras una consulta de la agencia estadística comunitaria Eurostat sobre la clarificación del criterio empleado para el registro de inyecciones de capital en las cuentas públicas y el ejercicio partió de la medida efectuada por Bélgica y Francia para proveer a Dexia de liquidez por 5.500 millones de euros, de los que Bruselas tenía que aportar 2.900 millones.

Así, Bélgica no ha podido cumplir su objetivo de déficit del 2,8 % del PIB en 2012 y ha superado de lejos el 3 % a partir del cual la Comisión Europea (CE) puede decidir imponer sanciones.

El Gobierno belga ha pedido a la CE que no tenga que cumplir su objetivo del 2,15 % del PIB para 2013.

Según la prensa local, a principios de semana, el vicepresidente de la CE y comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, dijo al Gobierno belga que no tiene que limitar estrictamente el déficit al 2,15 %, pero que a cambio debe tomar medidas estructurales equivalentes al 1 % del PIB y reducir la deuda por debajo del 100 %.

Por eso, según las mismas fuentes, el Estado belga sopesa deshacerse de al menos 1.000 millones de euros en participaciones que tiene el Estado en bancos o en empresas como Belgacom.

Según el Banco Nacional de Bélgica la deuda pública fue del 99,6 % del PIB en 2012, 1,8 puntos porcentuales más que en 2011.