Telecomunicaciones

Bruselas aprueba la fusión de Orange y MásMóvil

La autoriza a condición de que las compañías cumplan plenamente un paquete de compromisos ofrecido a Bruselas para garantizar la libre competencia

Detalle del logotipo de la compañía de telefonía móvil Orange en el centro de Londres.
Detalle del logotipo de la compañía de telefonía móvil OrangeDreamstime

La Comisión Europea (CE) ha dado luz verde a la fusión de Orange España y MásMóvil. Las autoridades de Competencia europeas han aprobado hoy martes la creación de la "joint venture conformada por ambas compañías de telecomunicaciones con la condición de que las empresas cumplan plenamente con un paquete de compromisos firmados con la compañía rumana Digi y ofrecidos a Bruselas para garantizar la libre competencia, según ha informado en un comunicado la vicepresidenta del Ejecutivo comunitario encargada de Competencia, Margrethe Vestager.

La fusión de Orange España y MásMóvil estaba pendiente de Bruselas, que se ha tomado su tiempo para autorizarla. Su luz verde llega tras una investigación en profundidad por parte de las autoridades de Competencia de la transacción. Tras su investigación, a la institución que dirige Vestager le preocupaba que la operación, tal como se notificó inicialmente, restringiera la competencia en los mercados minoristas para el suministro de servicios de internet fijo y móvil en España mediante paquetes o de forma independiente. En particular, la Comisión concluyó que la transacción iba a crear el mayor operador por número de clientes en España, con un importante incremento de cuota de mercado en todos los mercados minoristas relevantes.

Además, Bruselas añadió que Orange y MásMóvil son competidores directos en los mercados minoristas españoles de suministro de servicios de internet móvil y fijo y que MásMóvil viene haciendo ofertas muy competitivas y ha ido creciendo con el paso de los año. Sus principales marcas, Yoigo y MásMóvil, han captado un importante número de clientes de Orange en España, por lo que, según concluyó, la transacción "eliminaría a un competidor cercano e importante". A Bruselas le inquietaba asimismo que esta supresión de competidores pudiera generar incrementos en los precios a los consumidores muy por encima del 10%. Igualmente, advirtió de que cualquier eficiencia que la transacción pudiera haber creado, como ahorros de costos o despliegue de 5G o fibra, "no habría compensado los importantes efectos anticompetitivos de la transacción".

Para abordar todas estas preocupaciones las autoridades de Competencia comunitarias, Orange y MásMóvil se comprometieron el pasado mes de diciembre a ceder espectro en poder de MásMóvil a Digi en tres bandas de espectro de frecuencia, dos bandas de media frecuencia (1.800 MHz y 2.100 MHz) y una banda de alta frecuencia (3,5 GHz). El espectro móvil que se venderá permitirá a Digi, según la Comisión, construir su propia red móvil y "ejercer una fuerte presión competitiva sobre la empresa conjunta". Además, Orange y la operadora rumana firmaron un acuerdo de roaming nacional opcional, que Digi puede decidir utilizar o no. La posibilidad de utilizar la red de la empresa conjunta complementará la propia red de Digi, que la compañía rumana comenzará a desplegar con el uso del espectro cedido. Para la Comisión, esta opción es "fundamental dado que, al igual que la red actual de MásMóvil, la futura red móvil de Digi probablemente no cubriría toda España. Como el acuerdo de roaming nacional es opcional, Digi tendrá libertad para permanecer con su actual proveedor mayorista (Telefónica) o elegir otro operador de red móvil en España (es decir, la empresa conjunta o Vodafone)".

Acuerdo con Digi

Por todo ello, la Comisión, según explica el comunicado, considera que el acuerdo de Orange y MásMóvil con Digi aborda plenamente los problemas de competencia identificados y preservará "un mercado de telecomunicaciones competitivo en España, tanto en términos de precio como de calidad, así como en términos de despliegue de la red 5G, en beneficio de los consumidores". Además, añade que Digi es un comprador adecuado para el espectro vendido, ya que actualmente es el OMV más grande y de más rápido crecimiento en España. Digi, añade Bruselas, también tiene experiencia como operador de redes móviles en otros Estados miembros de la UE, como Rumanía. Además, tiene una red de banda ancha fija (fibra) relativamente grande en España, que continúa construyendo. En consecuencia, concluye, los compromisos no incluyen ningún activo fijo de banda ancha.

La decisión de la Comisión se esperaba para el próximo jueves y desde Orange España confiaban en que fuera favorable a sus intereses, como finalmente ha resultado ser. En la presentación de resultados del pasado ejercicio celebrada el jueves de la semana pasada, el consejero delegado de la compañía, Ludovic Pech, aseguró que, una vez logrado el visto bueno de Bruselas y teniendo en cuenta los trámites financieros y legales, así como los permisos de las autoridades españolas que le quedan pendientes -y que podrían llevarles un par de semanas-, la compañía espera concluir la integración de ambas compañías antes de que acabe marzo. Una vez cerrada la fusión, la operadora francesa confía en empezar a operar al día siguiente de forma conjunta con la "joint venture" que conformará con MásMóvil.

La fusión dará lugar a una compañía que contará con más de 7,3 millones de clientes de banda ancha, más de 30 millones de servicios móviles y más de 2,2 millones de clientes de televisión.

Como han recordado Orange y MásMóvil, la "joint venture" gestionará importantes activos de red y de IT para asegurar una cobertura nacional tanto en fibra como en 4G/5G. En términos financieros, la entidad combinada se convertirá en un operador con ingresos estimados de más de 7.400 millones de euros y un EBITDAaL -beneficios antes de impuestos y de alquileres- de más de 2.300 millones de euros, con un valor de empresa de 18.600 millones de euros y unas sinergias esperadas de más de 450 millones al año (a partir del cuarto año tras el cierre de la operación.