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Bruselas mantiene su estrategia de salida a la crisis de cara a 2013

La Comisión Europea (CE) apostó hoy por mantener en 2013 el rumbo de las políticas económicas de la Unión para salir de la crisis, sin variar las cinco grandes prioridades que fijó para este año.

La Razón
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Según Bruselas, las estrategias aplicadas "están empezando a mostrar resultados"como la reducción de déficits públicos, menos tensión en los mercados financieros y señales de que la competitividad mejora en algunos países, pero subrayó que se necesita continuar con las reformas.

Por ello, la CE considera que de cara al próximo año conviene mantener los cinco grandes objetivos fijados en 2012, que pasan por aplicar una consolidación fiscal "diferenciada"y que no dañe el crecimiento, restaurar el crédito a la economía y promover el crecimiento y la competitividad para el momento actual y el futuro.

Además, Bruselas pide acciones para hacer frente al paro y a las consecuencias sociales de la crisis y modernizar la administración pública.

"Es crucial que sigamos nuestra estrategia de consolidación fiscal, reformas económicas e inversiones precisas. Es la única forma de restaurar la confianza y de crear un crecimiento duradero", señaló el presidente del Ejecutivo comunitario, José Manuel Durao Barroso, en un comunicado de prensa.

El político portugués reconoció que las reformas "son difíciles, dolorosas y que pueden tener consecuencias sociales", por lo que aseguró que la Comisión está "haciendo todo para hacer la recuperación tan rica en empleo como sea posible".

El problema del paro también fue destacado en rueda de prensa por el comisario de Empleo y Asuntos Sociales, Laszlo Andor, quien señaló que la "crisis del empleo en Europa se ha profundizado y la perspectiva ha empeorado aún más".

"Cada mes de 2012 hemos visto aumentos en el número de parados, y hoy estamos alrededor de los 26 millones", indicó Andor, que hizo hincapié en el aumento de las diferencias entre los Estados miembros, poniendo como ejemplo la tasa del 4,4 % de Austria y la cercana al 26 % de España.

Andor defendió las recetas que habitualmente ha propuesto Bruselas para combatir el problema: una reducción de los impuestos sobre el trabajo, impulsar el mercado único y sectores con potencial para crear nuevos puestos, mejorar la resistencia del mercado laboral a las crisis con un aumento de la flexibilidad o reducir las diferencias entre los contratos permanentes y los temporales.

Defendió también la necesidad de mejorar el acceso de los jóvenes al mercado, combatir el paro de larga duración e impulsar la protección social, ante el aumento de la pobreza provocado por la erosión de la red de seguridad familiar que ha traído la crisis.

Por otra parte, Bruselas defiende inversiones en investigación pública y privada, mejoras formativas y una reducción de las barreras para la creación de nuevos negocios como fórmulas para impulsar el crecimiento.

Todos los mensajes son parte de la tercera encuesta anual del crecimiento, que establece las prioridades económicas y sociales de la UE y que debe guiar a los Estados miembros en sus esfuerzos de impulsar el crecimiento y el empleo.

La encuesta da inicio al llamado semestre europeo que es el calendario para coordinar las políticas económicas y presupuestarias de la UE y sobre todo de la eurozona.