Gobierno

Sánchez da las riendas del Ministerio de Economía a un perfil técnico, Carlos Cuerpo

Sánchez también ha ascendido a María Jesús Montero a la vicepresidencia primera y otorga a José Luis Escrivá la cartera de Función Pública junto a Transformación Digital

Secreto desvelado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Carlos Cuerpo, hasta ahora secretario General del Tesoro y Financiación Internacional, será el nuevo ministro de Economía, en sustitución de Nadia Calviño, que asume hacia la presidencia de Banco Europeo de Inversiones (BEI), por lo que el Ministerio deberá tomar un rumbo más técnico, menos político y de corte europeísta, en consonancia con el perfil del nuevo ministro.

En una nueva comparecencia institucional, tras previa comunicación a su Majestad el Rey, Sánchez anunció el cambio en el ministerio económico, así como el ascenso a la vicepresidencia primera de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que implica la desaparición de la vicepresidencia cuarta y deja la cúpula del Ejecutivo en con tres vicepresidencias.

Estos dos nombramientos implican también un tercer movimiento. El salto de Montero para convertirse en mano derecha oficial del presidente en el Gobierno -ya lo era en el partido- ha provocado que la Secretaría de Estado de Función Pública, hasta ahora en manos de Montero en Hacienda, pasará a formar parte del Ministerio de Transformación Digital, liderado por José Luis Escrivá, que ve reforzadas sus competencias en esta remodelación. De esta manera, Sánchez intenta compensar el paso atrás que le obligó a dar a Escrivá tras su salida de Seguridad Social, con la esperanza de asumir la cartera económica, que finalmente ha acabado en manos de Carlos Cuerpo.

Sánchez ha destacado en su declaración desde Moncloa que el nuevo departamento de Escrivá pasará a llamarse Ministerio para la Transformación Digital y la Función Pública, con el objetivo de aprovechar la "digitalización para mejorar la calidad de los servicios públicos". De esta forma, el presidente del Gobierno aligera las funciones de la titular de Hacienda, que deberá centrarse en dirigir una vicepresidencia primera nada fácil, pendiente de la coordinación de la política económica y de la relación con los socios de Gobierno.

En su breve alocución, Sánchez quiso poner el valor a la ministra saliente, Nadia Calviño, al destacar la "solvencia y la honestidad" como los dos valores que mejor resumen a la próxima presidenta del BEI y que son los mismos calificativos que ha utilizado para describir al nuevo ministro de Economía quién, según avanzó Sánchez, será el que presida la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos.

En cuanto a María Jesús Montero, en su nuevo puesto formará equipo con Cuerpo para coordinar la política económica del Gobierno, que tiene importantes retos en el corto plazo: la vuelta de las reglas fiscales suspendidas -y evitar superar el 3% de déficit en 2024-, la reducción de la deuda pública -que supera el 100% del PIB-, la ralentización económica que ya asoma en el horizonte y la gestión de los fondos europeos. También tendrá que asumir la parte que le corresponda en el contrapeso que, junto a Montero, tendrá que ejercer para controlar la cota de poder que exige siempre la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.

La reacción por parte del PP a los nombramientos ha sido inmediata. Juan Bravo, vicesecretario de Economía del Partido Popular, ha asegurado que estos cambios en el Gobierno con "una oportunidad perdida para reducir su tamaño. Mismo número de integrantes, mismo número de nóminas, de coches, de asesores...". Además, ha criticado el movimiento claramente política en la cúpula del Ejecutivo. "Que la número dos del PSOE sea la número dos del Gobierno, mientras la portavoz del Ejecutivo es también la portavoz de Ferraz, es la demostración de que Sánchez quiere un Gobierno de trinchera y más preocupado por ir al choque con el PP que por dignificar la gestión pública".