La Casa de Hormigón abre su negocio al mundo de la franquicia

La Casa de Hormigón ofrece la oportunidad de conseguir sus ventajas constructivas y comerciales a aquellos interesados en desarrollar una franquicia de esta compañía, puntera en su sector. Nacida de la mano del arquitecto técnico José Manuel Ruiz García junto con su equipo de profesionales, compuesto por departamento técnico, comercial y el personal de obra. Tras 30 años de desarrollo se ha posicionado como una de las primeras empresas especializadas en sistema de construcción industrializada de casas con muros prefabricados de hormigón. Ésta consiste en una base asentada en la construcción tradicional pero llevada a un modelo de industrialización con el que consiguen la optimización de los recursos necesarios para la ejecución de las viviendas, destacando el ahorro de tiempo, que llega a reducirse hasta un 60% con la consiguiente reducción de costes directos e indirectos de obra.

La Casa de Hormigón ha logrado combinar la personalización con la eficiencia para diseñar hogares a medida que se adapten a las diferentes necesidades y gustos personales. Para ello emplea técnicas ultramodernas para construir módulos en un entorno controlado, asegurando la calidad y sostenibilidad del proyecto. Del mismo modo, el equipo profesional coordinaría con los franquiciados la instalación completa de la vivienda en el terreno, garantizando la conformidad con todas las normativas locales.

En concreto, los puntos fuertes radican en la innovación de productos respecto a la estructura de la vivienda tradicional para lograr un atractivo diferencial, una oportunidad de negocio basado en la rentabilidad -la demanda ha aumentado de forma exponencial en los últimos años-, la fabricación propia de fachadas y estructuras de hormigón industrializadas, y en el citado ahorro de tiempo de ejecución, hasta un 60% frente a la casa tradicional.

José Manuel Ruiz García, fundador de la empresa, explica que entre las ventajas que obtendría el franquiciado al integrarse en su red se encuentra “el cambio al sistema constructivo industrializado, que implica ventajas tangibles en la ejecución de la obra que tienen repercusión económica inmediata en la cuenta de resultados”. Ruiz García también destaca cómo su fórmula de construcción logra “la sustitución de viejos oficios, como encofradores o ferrallistas, en los que escasea la mano de obra cualificada, por unos nuevos oficios más tecnificados. De hecho”, prosigue, “se mejora en la gestión de los proyectos al estar todo planificado, codificado y definido en 3D. Y se mejora, siguiendo nuestro proceso constructivo, la calificación energética de las edificaciones”.

Además, el franquiciado obtendrá para su empresa y para cada una de sus viviendas, según el creador de la Casa de Hormigón, “formación teórica y práctica de nuestro sistema de construcción, con un análisis previo y valoración inicial de la estructura de la vivienda a realizar para que pueda incluirla en su presupuesto de costes. Y como mencionaba antes, con modelado 3D y definición de la estructura de la vivienda en formato BIM, partiendo de los planos CAD o 3D arquitectónico que éste aporte. En este modelado se aportarán las soluciones constructivas necesarias para transformar un proyecto de construcción tradicional en uno industrializado. Esta documentación se devolverá al franquiciado para que la consensue con la Dirección Facultativa de la obra y, con su aprobación, realizar el cálculo de la estructura de hormigón”.

La compañía, además, entrega la documentación para la incorporación al proyecto de ejecución con memoria de cálculo, plano de cimentación, montaje y forjados, planillas de fabricación y de definición de anclajes y elementos metálicos, y los planos de fabricación de escaleras. Junto a ello, mediciones detalladas de muros, refuerzos metálicos, estructuras auxiliares, planificación de portes y un largo etcétera para el control de la estructura por parte del franquiciado.

José Manuel Ruiz García desea realzar asimismo que guiarían al franquiciado en la elaboración de los presupuestos definitivos y cerrados de la estructura puesta en obra. Inicialmente, y durante el período de formación práctica, la estructura se entregará montada, y también si en adelante así lo solicita el franquiciado. Una vez finalizada la formación la estructura se entregará en obra para su montaje por parte de su personal. “Con lo anteriormente expuesto, el franquiciado conseguirá una posición ventajosa, en tiempos, costes y sistema con respecto a cualquier competidor tanto de construcción tradicional como de cualquier otro método industrializado o modular que le colocará en el mercado como una empresa moderna y tecnificada”.

El perfil de franquiciado, lo define Ruiz García, como una persona física o jurídica, “ya implantado en su zona de actuación como constructor o reformista, que entienda la necesidad de renovarse y ofrecer a sus clientes este sistema constructivo. No obstante, también puede ser franquiciado o delegado de la franquicia un estudio de arquitectura, una empresa de proyect manager o una promotora”.

Más información en: https://lacasadehormigon.es/ y https://lacasadehormigon.es/franquicia/