Vivienda

¿Casas de obra nueva o segunda mano? Esta es la opción más barata

Los que adquieran una vivienda de obra nueva deberán dar de alta los suministros, cuyo precio puede ascender hasta los 480 euros

Una persona sujeta las llaves de una vivienda
Una persona sujeta las llaves de una viviendaLa RazónLa Razón

Convertirse en propietarios de una vivienda es el sueño de muchas personas en nuestro país. Y aunque comprar una vivienda es cada vez más inalcanzable desde que los precios parecen no encontrar techo, hay algunos que logran hacer frente a los obstáculos económicos y se plantean si es mejor optar por una de obra nueva o de segunda mano.

El precio de la vivienda es uno de los factores decisivos a la hora de decantarse por una u otra, no obstante, la decisión final también dependerá de otros factores como las características de los inmuebles, los impuestos que se deben abonar o incluso las necesidades de los compradores.

El metro cuadrado en las viviendas de obra nueva suele ser más caro que en aquellas de segunda mano, concretamente, estos pisos nuevos tienen un precio entre un 10% y un 15% superior, según Sociedad de Tasación. En este sentido, en la ciudad capitalina, una vivienda de obra nueva tiene un coste de 4.269 euros el metro cuadrado, mientras que en la de segunda mano este asciende a los 2.845 euros/m2. Por su parte, la vivienda de obra nueva en la ciudad Condal presenta un coste de 4.473 euros el metro cuadrado, mientras que la de segunda mano tiene un precio mucho más bajo (2.505 euros/m2). En el caso del País Vasco, el precio de la casa de obra nueva asciende a 3.111 euros el metro cuadrado, mientras que la de segunda mano se sitúa en los 2.425 euros/m2, aseveran desde el portal inmobiliario Fotocasa.

Pese a que las viviendas de obra nueva son más caras, estas tienen una mayor eficiencia energética y una mejor distribución así como luz natural, permitiendo un ahorro significativo en la factura de la luz. Asimismo, estas también cuentan con soluciones de domótica lo que favorece el ahorro y, por norma general, no será necesario hacer grandes reformas al tratarse de edificios nuevos.

Aquellos que apuesten por adquirir una vivienda de obra nueva deben dar de alta los suministros, cuyo precio puede ascender hasta los 480 euros, mientras que en una vivienda usada tan sólo se deberá cambiar la titularidad. Además, al comprar un inmueble de obra nueva se deberá abonar el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) –un 10% sobre el precio final de venta– y el Impuesto sobre Actos Jurídicos Documentados (IAJD) –suele oscilar entre el 0,5% y el 1,5% en función de la comunidad autónoma–.

En el caso de comprar una vivienda de segunda mano, la ubicación será más céntrica, por lo que podrá tener mejores servicios a su disposición. Además, en lo que respecta a los impuestos, se deberá pagar el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP), cuyo precio suele ser de entre el 6% y el 10%, en función de la comunidad autónoma en la que se encuentre.