Inflación
Competencia investiga a Repsol por ahorrar más de 500 millones a los consumidores justo tras alzar la voz contra el Gobierno
La compañía lamenta rotundamente que se le abra un expediente sancionador por una medida destinada a favorecer a los usuarios tras una inspección de hace un año por una supuesta posición de dominio. Repsol amenazó con llevarse inversiones fuera de España por el "impuestazo"
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha iniciado un expediente sancionador contra Repsol por sus descuentos a los carburantes que ahorraron 500 millones de euros a los consumidores en plena escaldada de precios por el estallido de la guerra en Ucrania. La ofensiva del organismo llega justo después de que la compañía se pronunciase contra la intención del Gobierno de convertir en permanente el impuesto especial a la energéticas y amenazase con llevarse inversiones fuera de España. En concreto, la CNMC considera que, con los descuentos implementados entre marzo y diciembre de 2022 en sus estaciones de servicio mediante apps o tarjetas de fidelización, la energética podría haber incurrido en posibles prácticas anticompetitivas aprovechado su posición de dominio en el mercado mayorista de hidrocarburos en España. Repsol rechaza el expediente, niega una posición de dominio y lamenta que se castigue a las empresas por ayudar a los clientes.
Competencia también acusa a Repsol de incrementar el precio que terceros competidores -estaciones de servicio independientes- pagan a la compañía por adquirir el combustible en el mercado mayorista. Así, el organismo estima que, dada la posición de Repsol en el mercado mayorista, estas conductas habrían supuesto una estrategia "exclusionaria" frente a terceros competidores -estaciones de servicio independientes-. Además, el organismo añade que estas conductas habrían tenido la capacidad de erosionar los márgenes comerciales de dichos competidores y limitar la competencia en la distribución minorista.
En su comunicado, la CNMC advierte de que estas conductas podrían constituir una posible vulneración del artículo 2 de la Ley 15/2007 de 3 de julio de Defensa de la Competencia (LDC) y del artículo 102 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE). No obstante, la incoación de este expediente no prejuzga el resultado final de la investigación, a la par que se abre ahora un periodo máximo de 24 meses para su instrucción y resolución.
El organismo presidido por Cani Fernández circunscribe la investigación a Repsol Comercial de Productos Petrolíferos, Repsol Directo, Repsol Customer Centric, Solred, Campsa Estaciones de Servicio y Repsol, como grupo que está presente en toda la cadena de valor del proceso de producción y comercialización de combustibles para la automoción.
Repsol rechaza el expediente y niega una posición de dominio
Por su parte, Repsol "rechaza rotundamente el expediente abierto por la CNMC". La compañía asegura que "no tiene una posición de dominio en el mercado de carburantes español y cumple de forma estricta con la regulación en materia de competencia".
Asimismo, la firma señala que ha hecho "un enorme esfuerzo para ayudar a sus clientes a través de descuentos y hacer frente así a las subidas de precios derivadas de la guerra en Ucrania", con más de 500 millones de euros destinados a descuentos en sus estaciones de servicio en España. Por ello, consideraron que el organismo de Competencia ha abierto un expediente sancionador "por una medida dirigida a favorecer a los consumidores".
Repsol fue el primer operador que estableció de manera voluntaria, el 16 de marzo de 2022, descuentos –tanto a particulares como a transportistas− adicionales a otros habituales que ya venían disfrutando sus clientes desde hace años, y que además se sumaron a la bonificación estatal de 20 céntimos por litro puesta en marcha el pasado 1 de abril de 2022. El ahorro logrado para los consumidores fue asumido por la compañía reduciendo sus márgenes comerciales.
Consciente de las dificultades que atravesaban los conductores por el alto precio de los carburantes y la desaparición de la bonificación estatal en 2023, la compañía prolongó desde el 1 de enero y hasta el 31 de marzo de 2023 su descuento de 10 céntimos por litro de carburante a los usuarios de Waylet, al repostar en las más de 3.300 estaciones de servicio que la compañía tiene en España. En abril, la energética sustituyó su descuento de 10 céntimos por un plan que vinculaba las ayudas (desde 5 a 20 céntimos por litro y un 100% del importe en las recargas de los vehículos eléctricos) a que el cliente contratase sus productos energéticos y los abonase a través de Waylet.
Desde el 6 de septiembre y hasta el 15 de octubre, la firma duplicó la bonificación máxima hasta los 40 céntimos por litro de combustible con el plan coche, luz, calefacción y solar, aunque finalmente decidió extender los descuentos hasta el 10 de enero de 2024 para rebajar el gasto en carburantes de sus clientes durante la Navidad.
El foco puesto en Repsol
Esta investigación se inició a raíz de las denuncias presentadas por la Asociación Nacional de Estaciones de Servicio Automáticas (AESAE) y la Asociación de Comercializadores Independientes de Hidrocarburos por prácticas contrarias a los artículos 2 de la LDC y 102 TFUE. Ante la sospecha de existencia de posibles prácticas anticompetitivas, la CNMC abrió una información reservada (artículo 49.2 de la LDC) y llevó a cabo una inspección domiciliaria en la sede de Repsol.
En diciembre del año pasado, la CNMC ya procedió al registro de las sedes de la propia Repsol, así como de las dos otras grandes petroleras del país -Cepsa y BP-. Sin embargo, el expediente anunciado ahora ya no es colectivo y solamente afecta y se centra en Repsol, empresa que se ha mostrado especialmente beligerante contra una posible continuidad del impuesto especial a las energéticas del Gobierno.
✕
Accede a tu cuenta para comentar