Empresas

«Creceríamos más si integráramos en la empresa todas las generaciones»

El evento más importante de marketing vuelve a Ifema para dar a conocer cuáles son los nuevos desafíos que deben afrontar las empresas

De izquierda a derecha, Idoia Maguregui, José Petisco, Eduardo Gómez, Ana Muriel, Josep Manel Martínez, Verónica Jiménez y Carlos González
De izquierda a derecha, Idoia Maguregui, José Petisco, Eduardo Gómez, Ana Muriel, Josep Manel Martínez, Verónica Jiménez y Carlos Gonzálezlarazon

El evento más importante de marketing vuelve a Ifema para dar a conocer cuáles son los nuevos desafíos que deben afrontar las empresas.

«Baby boomers», generación X o «millennials». Son palabras que, a menudo escuchamos y que hacen referencia a la distribución del mercado laboral según la edad de los trabajadores. Las empresas, a la hora de construir sus plantillas, realizan un meticuloso estudio de los distintos conocimientos, valores y experiencias que les pueden aportar los empleados según su correspondiente generación. Hoy es Marketing, el evento por excelencia en el campo del Management, el Marketing y la Economía Digital, organizado por ESIC Business & Marketing School, celebró en Ifema su decimoquinto aniversario, en el que los cerca de 3.000 asistentes pudieron conocer las técnicas más avanzadas que utilizan las multinacionales para la atracción de clientes y el funcionamiento de las mismas.

Esta cita, que en los profesionales de esta materia está agendada para todos los años, sirvió de excusa a LA RAZÓN, con la ayuda del personal de la escuela de negocios, para promover un debate centrado en las cinco generaciones coexistentes, en el que participaron renombrados profesionales que dominan de primera mano el mundo empresarial y la gestión de los recursos humanos.

Prioridad

Josep Manel Martínez, presidente y director general de Philips Lighting España y Portugal; José Petisco, presidente de Cisco España; Ana Muriel, directora general de Innedito16; Verónica Jiménez, CEO y fundadora de Womancard; Idoia Maguregui, subdirectora general de Medios de Sareb, y Carlos González, profesor de ESIC Business & Marketing School, fueron los ponentes que intervinieron en esta mesa redonda.

Todos ellos coincidieron en sus diferentes análisis en subrayar la importante situación que vive nuestro país a nivel de conocimientos tecnológicos y de creatividad. Destacaron que una de las prioridades de las compañías es integrar a todas las generaciones en busca del mayor beneficio común. En este sentido, el presidente de Cisco España ofreció la estructura que dividía a los trabajadores según su edad o generación en su entidad. «Tenemos cuatro de esas generaciones. Los del “baby boomer” son el 4%, la generación X (nacidas después del ''baby boom'') somos el 68%, los «millennials» suponen el 26% y el 2% restante se han incorporado una vez acaban sus estudios», afirmó. En Sareb, su subdirectora general de Medios, Idoia Maguregui, calculó que la edad media de los trabajadores es de 42 años con un promedio de 12 años de experiencia.

Cuando hablamos de una determinada generación no hacemos referencia únicamente a su edad, sino a todas las experiencias, conocimientos y valores que se han adquirido o son inherente a esa etapa concreta, la cual posee sus correspondientes particularidades sociales y culturales. En el ámbito empresarial, resulta fundamental buscar y encontrar la fórmula perfecta que reúna a todas las generaciones y que cada una de ellas aporte su granito de arena. En este sentido, Josep Manel Martínez confesó que «el secreto está en la combinación, ninguna generación es mejor que otra, por lo que tenemos que valorar los puntos comunes». Pero lo que es evidente es que cada grupo es distinto y que cabe la posibilidad de que se generen conflictos en la empresa si no se fusionan adecuadamente.

La fundadora y CEO de Womancard puso como ejemplo su compañía, un negocio con un perfil muy joven y digital, que recurrió al asesoramiento sénior no sólo para la transmisión de experiencia, sino sobre todo para inculcar los valores de respeto hacia los trabajadores. «Es la escuela de la vida, qué bonito y cuánto podríamos crecer teniendo en cuenta lo digital y la experiencia», apuntó. Sin embargo, Carlos González quiso matizar: «Cuando hablamos de generaciones, lo que originamos son barreras, el reto es el de crear una cultura sin distinciones ni identidades personales en contraposición del otro». Y criticó los estereotipos que se generan alrededor de la edad.

Un gran número de empresarios piensa que los jóvenes, aunque dispongan de la mejor formación académica de nuestra historia, no están preparados para entrar en el mercado laboral. En cierta manera, es una afirmación que se refleja en el número de parados que tenemos en la actualidad. España cerró 2017 con una tasa de desempleo del 16,4%, una cifra que en los menores de 25 años se incrementa hasta un 36,8% para señalarnos como uno de los países de la Unión Europea con más desempleo juvenil.

El directivo de Philips cree que no hay duda de que «estas generaciones llegan con nuevas ideas». Una opinión muy parecida ofreció Ana Muriel, quien recordó «la gran cantidad de jóvenes que emprenden con éxito». Los seis ponentes coincidieron en que nuestro país vive una época muy importante debido al nivel de creatividad de la sociedad a una edad muy temprana, una creatividad marcada por el uso y explotación de la tecnología de manera exponencial. No hay excusas para no apostar por el talento juvenil.

Algunos aspectos que son distintivos entre las diferentes franjas de edad son los valores y la visión conceptual que se tiene hacia el empleo. En esta línea, Verónica Jiménez comentó que los distintos principios «influyen a la hora de relacionarnos con la empresa, pero todos tenemos algo en común: nos gusta ser reconocidos». Frente a esta afirmación, José Petisco se mostró crítico con las empresas y destacó que «tenemos que hacer mejores ejercicios de reconocimiento».

Sin embargo, no todos los grupos de edad actúan de igual manera. Para la directora general de Innedito16, «los jóvenes no tienen tanta paciencia respecto a promociones en el trabajo y retribuciones». La lealtad hacia la empresa fue uno de los puntos más comentados. La mayoría de los participantes opinaron que, por su forma de vivir, los jóvenes tienden a estar más desvinculados de su trabajo que los mayores, los cuales suelen tener más dificultades a la hora de afrontar cambios. El profesor de ESIC cree que no se trata únicamente de una diferenciación en los valores, ya que en ese aspecto «estamos a un nivel muy semejante». La diferencia está «en el entorno y en cómo nos adaptamos al mismo, eso no significa que tengamos distintos valores».

El sistema educativo juega un papel clave en nuestra integración en la sociedad, nuestra percepción de la realidad que nos rodea y, sobre todo, en los conocimientos que adquirimos. Y esta materia tan crucial en nuestra vida suscitó un debate que ofreció una gran variedad de opiniones que defendían o atacaban el sistema actual. Idoia Maguregui criticó la actual estructura educativa y denunció la antigüedad que tienen las infraestructuras y la propia enseñanza. «En las empresas hay mejor calidad educativa que en la propia base», afirmó con rotundidad. En la misma línea crítica, Carlos González, que conoce a la perfección el sistema del profesorado, tildó de «rígida» e «incoherente» la organización actual y aseguró que «las estructuras no están adaptadas a la actualidad». Con una opinión totalmente distinta, el presidente de Philips Lighting España y Portugal recordó que los españoles «somos muy críticos con nosotros mismos» y que el sistema educativo es muy bueno respecto al de otros países aunque «haya cosas que mejorar». Al mismo tiempo, Muriel puso como ejemplo su experiencia personal para defender el funcionamiento educativo. «A mí me han enseñado todo lo necesario para mi actual trabajo».

Las empresas juegan un doble papel y tienen obligaciones ante sus empleados y ante su entorno. «Las compañías tenemos que liderar los cambios», subrayó la representante de Sareb. La sociedad de hoy en día es más heterogénea que la de hace 40 años, lo que supone un gran reto para las entidades. Pero que no cunda el pánico, al fin y al cabo, dijo Josep Manel Martínez, «no es nada diferente a lo que ya hemos visto hace muchos años».