La crisis del Mar Rojo remata las cuentas de Maersk, que gana un 87% menos

El conglomerado danés AP Moller-Maersk, dueño del segundo mayor operador de transporte marítimo de mercancías, logró un beneficio neto atribuido de 3.549 millones de euros en 2023, lo que supone una caída del 86,9% respecto del año anterior. Entre octubre y diciembre de 2023, el gigante danés registró pérdidas de 405 millones de euros, en contraste con el beneficio neto atribuido de 4.597 millones, contabilizado en el mismo periodo de 2022.

Durante el cuarto trimestre de 2023 la compañía llevó a cabo una distribución total de efectivo a los accionistas de 716 millones procedentes de recompras de acciones. No obstante, "dada la mayor incertidumbre", el consejo de administración de Maersk ha decidido suspender inmediatamente el programa de recompra de acciones con la intención de revisar su reinicio una vez que las condiciones del mercado en el negocio de la división de transporte marítimo se hayan estabilizado.

"2023 fue un año de transición tras el extraordinario auge del mercado provocado por la pandemia", ha señalado Vicente Clerc, consejero delegado de la compañía, quien ha defendido los "sólidos" resultados a pesar de que las circunstancias cambiaron significativamente. "Estamos bien posicionados para gestionar los vientos en contra esperados en 2024", ha asegurado el ejecutivo de Maersk.

Clerc ha apuntado a que la situación en el mar Rojo -provocada por los ataques de los rebeldes hutíes a barcos de países que apoyan a Israel en la guerra de Gaza y que ha obligado a desviar las rutas al cabo de Buena Esperanza- genera "incertidumbre" de cara al resultado de este año. "Sigue habiendo una gran incertidumbre en torno a la duración y el grado de la perturbación del mar Rojo, con una duración de un trimestre a un año completo reflejada en el rango de previsión", advierte la compañía.

Las acciones del conglomerado retrocedieron un 14,69% tras la presentación de los resultados.