La diferencia en el impuesto de matriculación puede superar los 500 euros según la región

El pequeño aumento de las ventas sumado al impulso logrado por la subida de los precios de venta han logrado un aumento en la recaudación por el impuesto de matriculación, que ha ascendido un 14,7% más, hasta los 463 millones de euros entre enero y agosto, aunque es sólo un 8% si se compara con las cifras de hace un año. Según los datos de la Agencia Tributaria consultados por Efe, la cuota media a ingresar ha crecido apenas seis euros, de 725 a 731 euros.

El grueso de ese incremento se ha debido la matriculación de los automóviles con los motores más contaminantes, ya que de los motores de gasolina se han obtenido 293 millones, mientras que con los diésel el importe asciende a 168 millones. Apenas se ha ingresado un millón por los vehículos eléctricos y los que funcionan con gas licuado, por lo que la transición verde hacia un parque móvil de vehículos no contaminantes puede dejar este tributo prácticamente a cero si no se cambia su legislación tributaria.

Y todo pese a que en 2022 estuvo vigente por el año completo la nueva normativa de emisiones, por la que pasaron a pagar vehículos hasta entonces exentos de pago y que en 2021 sólo estuvo en vigor seis meses por la moratoria que se aplicó. La cuantía del impuesto de matriculación viene determinada por las emisiones de CO2 que genera el vehículo por cada kilómetro recorrido, por lo que los compradores de modelos más contaminantes pagan más que el resto. En concreto, si el coche no emite más de 120 gramos por kilómetro de CO2 (g/km) no se tiene que pagar, pero, en el caso de que el auto genere entre 121 y 160 g/km, el comprador añadirá un 4,75% del precio del vehículo sin impuestos a la factura final por el auto. Cuando el vehículo expulsa entre 160 y 200 g/km de CO2 a la atmósfera, se abona un 9,75 % adicional, y si emite más de 200 g/km, se añade un 15,75%.

La Comunidad de Madrid es la comunidad autónoma que ha ingresado una mayor suma por el impuesto de matriculación, hasta los 182 millones de euros en los primeros ocho meses de 2023, un 39,3 % del total nacional, gracias a ser el territorio en el que más coches se han registrado, 248.881 unidades. Le siguen Cataluña, con 68 millones de euros, y Andalucía, con casi 57 millones de euros, que también son la segunda y tercera comunidad autónoma en la clasificación por número de matriculaciones, con 82.946 y 70.306 coches, respectivamente.

Sin embargo, los cántabros son los compradores que más pagan por el impuesto de matriculación, 989 euros de cuota media a ingresar en el periodo comprendido entre enero y agosto. La Rioja, con 871 euros, y Asturias, con 855 euros, son las comunidades autónomas que tienen un mayor impuesto de matriculación tras Cantabria, mientras que Canarias, con 412 euros, e Islas Baleares, con 493 euros, cuentan con el menor importe a abonar. La diferencia a pagar entre un conductor de Cantabria y uno de Canarias es de 577 euros.