Protesta

Los directores territoriales y jefes de la Inspección de Trabajo firman un manifiesto contra Díaz y Montero y en apoyo a la huelga

Es la primera vez en la historia del organismo que sucede algo así. En el texto denuncian "insuficiencia" de recursos humanos, sobre todo "en mandos intermedios" y la "inexistencia de una estructura adecuada"

Yolanda Diaz y Maria Jesus Montero en el Pleno del Congreso que ha aprobado la Ley de Vivienda.
Yolanda Diaz y Maria Jesus Montero en el Pleno del Congreso que ha aprobado la Ley de Vivienda. David JarLa Razón

La rebelión dentro de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social (ITSS) ya no tiene freno y se ha extendido hasta los altos funcionarios del organismo. Los directores territoriales y los jefes provinciales de la Inspección han decidido dar un paso adelante y dar su apoyo explícito a las movilizaciones sindicales de los trabajadores con la firma de un manifiesto firmado por 57 de los 60 altos cargos de la institución. Un hecho así es la primera vez que sucede en la larga historia historia del organismo, creado en 1906.

Según detallan en el texto, manifiestan su "profunda preocupación por la situación de bloqueo en que se encuentra el proceso de modernización y reforzamiento" de la institución comprometido hace casi dos años, mediante la aprobación de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT), que sigue pendiente de su aplicación pese a haber sido aprobado por el acuerdo del Consejo de Ministros de 16 de noviembre de 2021, y que "constituye la herramienta fundamental para la indispensable mejora y adaptación a la realidad social de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. Responde, además, a un mandato legal de obligado cumplimiento para cualquier responsable político", explican.

Aunque sin citar explícitamente, dirigen sus palabras a las dos responsables directas de esta situación, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y la de Hacienda, María Jesús Montero, a las que recuerdan que siguen ignorando los problemas que afectan al organismo, que detallan en "insuficiencia de recursos humanos, y particularmente de mandos intermedios", en la "inexistencia de estructura adecuada que permita una organización eficaz del trabajo, una ausencia de carrera administrativa para sus funcionarios, y de unas condiciones económicas y laborales que no se corresponden con las funciones y responsabilidades asumidas desde hace años, produciéndose incluso situaciones de agravio y discriminación salarial".

Por eso consideran que "estas deficiencias están afectando hace ya tiempo a la capacidad de actuación que tiene la ITSS y no permiten desarrollar todas sus competencias con la eficacia, intensidad, complejidad y velocidad que requiere el mercado de trabajo actual y las demandas de las personas trabajadoras". En este sentido reclaman que "es inaplazable la necesidad de realizar una reforma profunda de nuestra organización en los términos pactados y que fueron objeto de una larga reflexión interna, en la que participamos directamente con nuestras aportaciones. Respaldamos a todos nuestros compañeros de las plantillas que estos días están movilizándose y apoyamos sus reivindicaciones, que son las nuestras".

Estos altos cargos también afean a las ministras que durante esta legislatura otros organismos se han visto beneficiados con mejoras "llevadas a cabo en muy corto plazo de tiempo y sin un ejercicio previo del análisis que nosotros hemos realizado, mejoras que no se nos ofrecen a la ITSS, sin que se hayan justificado las razones que impiden la modernización que venimos reclamando hace años de manera meditada, fundada y explicada".

En la conclusión del manifiesto piden la implicación de la sociedad para que muestre su apoyo para que se lleva a cabo "la adopción de las medidas necesarias para poder mejorar y consolidar el único servicio público existente para la protección de los derechos de los trabajadores". Las movilizaciones convocadas por todos los sindicatos del organismo (CSIF, CC OO, CIG, Sitss, Sislass, UGT, UPIT y Usess) sumarán los días 7 y 12 de junio dos nuevas concentraciones frente a los centros de trabajo de la Inspección en todas las capitales de provincia, paso previo a la huelga total y de carácter indefinido prevista a partir del 26 de junio si no se llega a una solución negociada, algo muy improbable, por el adelanto electoral y porque tanto desde Trabajo como desde Hacienda han confirmado que no se seguirá adelante con los acuerdos firmados.

La respuesta de Montero se ha limitado a asegurar que está «abierta al diálogo» y Díaz prefirió pasar de puntillas sobre este asunto y evitó pronunciarse.