Agricultura

Doble perjuicio para España

Trump ha logrado de Von der Leyen facilidades para que entren sus almendras o carne de porcino y aranceles para exportar productos clave a EE UU

TURNBERRY (Reino Unido), 27/07/2025.- El presidente de EEUU, Donald Trump y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, durante la reunión que han mantenid hoy domingo en el complejo de golf del lider republicano en la localidad escocesa de Turnberry. EFE / Fred Guerdin / Comisión Europea. ***SOLO USO EDITORIAL / SOLO USO DISPONIBLE PARA ILUSTRAR LA NOTICIA QUE ACOMPAÑA/ (CRÉDITO OBLIGATORIO)***
El presidente de EEUU, Donald Trump y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der LeyenFRED GUERDINAgencia EFE

L os productos agroalimentarios españoles tendrán más dificultades para entrar en los Estados Unidos, mientras que las mercancías agrarias procedentes de este país podrán acceder más fácilmente al mercado europeo. Este es el resumen que se puede hacer del contenido del acuerdo alcanzado hace un mes entre Trump y Von der Leyen, tras conocerse «algunos» de los detalles concretos a finales de la semana pasada. Insisto en lo de algunos, porque, a fecha de hoy, se desconoce la totalidad de lo pactado en su momento entre Washington y Bruselas, lo que supone una falta total de transparencia. En consecuencia, los efectos para el campo español van a ser dobles, y siempre negativos, mientras que los EE UU resultarán beneficiados porque, por un lado, percibirán aranceles y, por otro, tendrán más facilidades para vender sus mercancías en nuestro país y en otros estados de la Unión Europea.

De momento, el aceite de oliva, las aceitunas de mesa, los vinos, los productos lácteos, como los quesos, y algunos derivados cárnicos, especialmente del porcino ibérico, pagan un arancel del 15%, el establecido con carácter general, para acceder al mercado de Estados Unidos. En el caso de la aceituna de mesa hay que contar además con las normas comerciales que ya se estaban aplicando. Todos ellos constituyen las principales partidas exportadoras del sector agroalimentario español al país presidido por Trump. Finalmente, no han dado resultado las gestiones que han realizado las autoridades de la Comisión Europea para que el vino y otras bebidas alcohólicas europeas quedaran fuera de la guerra arancelaria. En algunos momentos, desde Bruselas y también el Gobierno francés, pensaron que se podría lograr este objetivo. Sin embargo, finalmente, los de Washington no han «tragado» y esas mercancías también estarán gravadas con los aranceles.

Pero es que, además, según se ha sabido a finales de la semana pasada, Trump arrancó a Von der Leyen un compromiso por el que la UE concederá lo que han denominado un «acceso preferencial» a su mercado para ciertos productos agroalimentarios procedentes de EE UU, como los frutos secos (almendra y nueces procedentes de California, entre otros), soja, lácteos, carne de cerdo, y algunas frutas y hortalizas. Por lo que se sabe hasta ahora, la reducción de los aranceles vigentes se realizará a través de un sistema de cuotas a cada producto específico, que faltan por concretar y que se conocerán a su debido tiempo. Desde el COPA-COGECA, la organización en la que están agrupados la mayor parte de los sindicatos agrarios y las cooperativas comunitarias, han puesto el grito en el cielo y han señalado que el campo europeo vuelve a pagar, una vez más, la factura de las negociaciones comerciales puestas en marcha por Bruselas. Además, han criticado el oscurantismo y la falta de transparencia europea.

En el caso de España preocupa todo lo relativo a los frutos secos, como las almendras y las nueces, que son una de las principales partidas importadoras de EE UU. Esta información se ha conocido cuando acaba de comenzar la campaña de recolección de la almendra. Desde la COAG y ASAJA han alertado de las consecuencias que puede tener esta nueva concesión a EE UU, que podrían traducirse en una bajada de los precios en el mercado interior, ya que habría una mayor oferta.

El sector del almendro ha conocido en España una importante expansión durante los últimos años, ya que se han realizado plantaciones con sistema intensivos y superintensivos, que están entrando en producción justo ahora. Por otro lado, desde Interporc, la interprofesional del cerdo de capa blanca, han expresado su preocupación por esa mayor facilidad que se ha dado a los productores y exportadores de los estados y por el aumento de la competencia en nuestro mercado. Las relaciones con EE UU no son el único asunto comercial que preocupa a los agricultores y ganaderos comunitarios, cuando está a punto de comenzar el nuevo curso político. En los próximos meses se deberá tomar una decisión sobre el acuerdo entre la UE y Mercosur, al que se opone una parte del sector agrario por considerarlo lesivo para sus intereses. Hasta ahora Francia ha intentado articular una minoría de bloqueo para impedirlo, con el apoyo de otros socios, sin que se haya plasmado en la realidad. Tras las últimas declaraciones de Macron y del presidente brasileño, Lula, el asunto parece haber entrado en la recta final. En este caso, las producciones españolas más perjudicadas serían las de carne de vacuno y también los cítricos.