Impresión 3D. Desde un Mini-yo a órganos humanos

Cuando hablamos de impresión 3D, nos referimos a un grupo de tecnologías que convergen en la fabricación tridimensional de objetos creados por el método de adición, superponiendo capas de material de forma sucesiva. Según los expertos en un futuro no muy lejano se podrá fabricar desde comida hasta un puente.

Las impresoras 3D se encuentran disponibles en el mercado y su venta ha tenido un gran crecimiento desde 2003, año en el que empezaron a ser puestas a la venta. Al principio, su precio oscilaba entre 100.000 y 500.000 euros: hoy oscilan entre los 15.000 y los 25.000 euros; e incluso se puede comprar por partes para armarla por cuenta del usuario, lo cual supondría un desembolso de poco más de 500 euros.

La impresión 3D es utilizada desde sus inicios en sectores industriales tales como, joyería, calzado, diseño y arquitectura, ingeniería, construcción y automoción por mencionar algunas; sin embargo, todavía hoy el debate sobre el uso doméstico que se le dará a esta tecnología sigue siendo un debate no resuelto.

Hoy, la impresión 3D tiene usos cada vez más frecuentes, pues permite crear sillas, lámparas, y cualquier tipo de objetos. Es el motivo de su incursión en nuevos terrenos como la ortopedia, desarrollando prótesis del cuerpo humano. También en la moda, lo que resulta revolucionario para un mercado que puede conseguir que el producto acabe desarrollándose en base su usuario/consumidor final, con un simple escáner del cuerpo y una posterior adaptación del diseño a ese escáner para su posterior impresión.

EL FUTURO DE LA IMPRESIÓN 3D: ÓRGANOS A PARTIR DE CÉLULAS MADRE

Otros usos innovadores de la impresión 3D, comprenden la elaboración de figuras con las formas que se deseen, por medio de un escáner que recoge la forma de personas y objetos para imprimirlos en miniatura, como es el caso de algunas tiendas especializadas en las que hacen el mini-yo de sus clientes.

Uno de los usos más increíbles de la impresión 3D, y que continúa en desarrollo es el de las bioimpresoras, que serán capaces de crear órganos, tejidos y partes del cuerpo humano a partir de células madre.

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