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Solo uno de cada diez empleados desea trabajar desde casa más de tres días a la semana

Tres de cada diez apuestan por hacerlo en ocasiones puntuales, mientras a dos sus empresas se lo permiten

Solo uno de cada diez empleados desea trabajar desde casa más de tres días a la semana
Solo uno de cada diez empleados desea trabajar desde casa más de tres días a la semanalarazon

España es diferente. Como botón de muestra de este tópico, el mercado laboral, que lo cumple al pie de la letra. En pleno siglo XXI ha evolucionado prácticamente en dirección contraria al resto de nuestros vecinos europeos, con una escasa adaptación de las nuevas fórmulas de trabajo que permiten conciliar la vida laboral y familiar, como el teletrabajo. Los españoles siguen prefiriendo salir de casa cada mañana para acudir a la oficina antes que quedarse en su hogar delante de un ordenador y cuidando de sus hijos. Se quejan de la falta de conciliación de la vida laboral y familiar, pero a la hora de la verdad no están dispuestos a renunciar al café y a las cañas con los colegas de trabajo, al calor de la jornada laboral. Así lo confirma una encuesta realizada por infojobs entre 2.865 personas. Tan sólo un trabajador de cada diez entrevistados asegura que le gustaría trabajar en casa más de tres días a la semana.

Neus Margallö, responsable de Estudios de Infojobs, achaca a la idiosincracia de los españoles esta preferencia por acudir a la oficina. “Nos gusta ir desde el punto de vista sociológico”, puntualiza. No obstante, advierte de que, al final, empresas y trabajadores se verán abocados a cambiar de mentalidad. A su juicio, es inevitable avanzar en el camino de medir los resultados laborales por objetivos y desterrar la vieja fórmula de contrastarlos por horas presenciales en los puestos físicos de las empresas.

Además, hay que tener en cuenta las evidentes ventajas del teletrabajo para las compañías. Infojobs destaca la reducción considerable de coste en diferentes áreas, como las infraestructuras y los equipos. Sin contar con que esta modalidad favorece la motivación de los empleados, lo que, a su vez, se traduce en un incremento de la productividad. De paso, contribuye a evitar la fuga de trabajadores y a reducir las horas personales y los días por enfermedad, así como representa un considerable ahorro energético tanto para empleados como para empleadores.

Sin duda, el sector tecnológico se sitúa a la cabeza de estos cambios. Mientras, en los sectores que trabajan de cara al público será prácticamente imposible, en su opinión, implantar el teletrabajo.

Los españoles se inclinan por no acudir a sus puestos de trabajo sólo en ocasiones puntuales. Es decir, sólo cuando la ocasión lo requiere, como en el supuesto de que su hijo se levante con fiebre. Eso sí, al día siguiente de vuelta a la oficina. Así lo corrobora el sondeo efectuado por Infojobs, que refleja que sólo tres de cada diez trabajadores desean no acudir a la oficina en momentos determinados, mientras apuestan por asistir al puesto de trabajo el resto del tiempo.

Seis de cada diez encuestados confiesan que les gustaría que sus empresas implantaran el teletrabajo como otra modalidad más de trabajo. Sin embargo, cuando se desciende al detalle el rechazo a esta fórmula se impone en el mercado laboral español. De estos seis trabajadores que apuestan por trabajar desde casa, tan sólo uno desea hacerlo más de tres veces por semana; otro, un par de días y otro se daría por satisfecho con poder trabajar un día. Mientras, sólo a dos de cada diez empleados sus empresas les permite teletrabajar en casa. Es decir, tan sólo el 20% pueden trabajar desde casa. Sin embargo, a uno de cada diez pueden permanecer en su hogar en ocasiones puntuales y no está instaurado de forma regular como modalidad laboral. El resto de trabajadores, es decir dos de cada diez, se muestran reacios a esta modalidad bien porque el tipo de trabajo que desempeñan lo hace prácticamente inviable o bien porque directamente no les encaja en su mentalidad.

Esta cifra pone de manifiesto la brecha que aún nos separa del resto de nuestros vecinos europeos. En Europa el teletrabajo es una tendencia que adquiere mayor peso con el paso de los años. Dinamarca, Suecia y Holanda se sitúan a la cabeza de la implantación de esta modalidad, con cuatro de cada diez personas realizando sus jornadas laborales fuera de la oficina, según los últimos datos de Eurostat que datan de 2015. Mientras, para España sigue siendo una asignatura pendiente.