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Impuestos

El año de los impuestos

La Razón
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El año 2012 pasará a la historia económica de España como el año de las subidas de impuestos. A base de impuestos, tasas y mecanismos similares se ha pretendido solucionar nuestros principales problemas económicos, y así se está haciendo también en el sector de la energía. Al incremento del IVA y a la ley de medidas fiscales para la sostenibilidad ambiental –que castiga principalmente a las tecnologías de generación más limpias y consagra una doble imposición sobre todas las energías primarias, y triple sobre la electricidad, sin contar con las tasas autonómicas– hay que sumar la Orden de peajes y tarifas para 2013. El precio de la electricidad acumula tres, cuatro o hasta cinco impuestos y tasas diferentes.

El Gobierno quiere recaudar como sea la cantidad necesaria para eliminar el déficit, y la subida de tarifas tiene un cuádruple disfraz. El primero, una subida de peajes (tarifas) propiamente dichas. El segundo, una subida de impuestos, cuyo efecto final sobre el consumidor es equivalente a un aumento de precio. El tercero, la adición de las tasas autonómicas, terreno en el que se debería haber puesto orden hace mucho tiempo, evitando la ruptura de la unidad de mercado. Por último, ese recargo por consumo excesivo, que supondrá, según las previsiones del Gobierno, 280 millones de euros. Si usted consume más que la media, pagará más por cada kilovatio hora que consuma. Y esto, al margen de que, por ejemplo, su familia sea numerosa, lo que exige un mayor consumo por unidad familiar (pero menor por cabeza), o de cualquier otra circunstancia fácilmente imaginable. No importa.

¿Cuánto subirá la luz el año que viene? Pues bastante, aunque dependerá de la parte de los nuevos impuestos que las empresas sean capaces de traspasar al precio final. Eso, sin contar la subida del IVA, que ya se nos ha olvidado. Un 3,3% de incremento de peajes más un 3% de repercusión de los nuevos impuestos, más una media de 4% de la penalización por consumo... No andará muy descaminado quien estime entre un 7 y un 10 por ciento.