Déficit del Estado

El empleo reduce un 12% el agujero de la Seguridad Social

El gasto en pensiones y prestaciones aumenta en 2.159 millones pero los ingresos por cotizaciones suben en 2.781 millones gracias a la mejora del mercado laboral. El déficit del Estado se hunde un 29% en los siete primeros meses del año por el alza de la recaudación tributaria

Sede en Madrid de la Tesorería de la Seguridad Social
Sede en Madrid de la Tesorería de la Seguridad Sociallarazon

El gasto en pensiones y prestaciones aumenta en 2.159 millones pero los ingresos por cotizaciones suben en 2.781 millones gracias a la mejora del mercado laboral. El déficit del Estado se hunde un 29% en los siete primeros meses del año por el alza de la recaudación tributaria.

El déficit del Estado cayó un 28,6% durante los siete primeros meses del año, según las cifras de ejecución presupuestaria publicadas ayer por el Ministerio de Hacienda. Entre enero y julio, las cuentas del Estado registraron unas necesidades de financiación por valor de 21.604 millones de euros, el equivalente al 1,86% del Producto Interior Bruto (PIB). En el mismo periodo del año pasado, el déficit ascendía a 30.259 millones, un 2,72% del PIB. Esta mejoría se debe a la reducción del gasto en el Estado, que cae hasta julio un 3,2%, y al aumento de los recursos, que crecen un 4,8% en los siete primeros meses del año.

Aunque los últimos datos correspondientes al conjunto de la Administración Central, comunidades autónomas y Seguridad Social no se publicarán hasta el próximo martes, ayer se reveló el avance de ejecución presupuestaria de la Seguridad Social, con un dato muy positivo. El déficit del sistema se redujo un 12% hasta julio en comparación con el mismo periodo de 2016. Además, en los siete primeros meses del año pasado, el agujero aumentó un 29%, en contraposición al descenso de este año.

5.100 millones de déficit

Las cuentas de la Seguridad Social arrastran un saldo negativo de 5.100 millones de euros entre enero y junio, frente a los 5.721 millones de déficit del año anterior. Este agujero es la diferencia entre unos ingresos de 76.802 millones y unos gastos de 81.902 millones. El mejor comportamiento se debe a que aunque los gastos han seguido aumentando, los ingresos han crecido por encima. En comparación con los mismos meses de 2016, los ingresos han subido en 2.781 millones, mientras que los gastos sólo han aumentado en 2.159 millones.

Destaca el incremento en las cotizaciones sociales, que se han elevado en 2.871 millones de euros, lo que equivale a un 4,78%. Entre enero y julio, los ingresos para la Seguridad Social por este concepto fueron de 62.955 millones. El Ministerio de Empleo explica este incremento por el mejor comportamiento del mercado laboral, gracias a la recuperación de la economía. «Viene originado por el aumento de la cotización de ocupados en un 5,41% (el crecimiento era del 3,52% hace un año), mientras la cotización de desempleados desciende un 4,92% (-7,59% en 2016).

Señala además que en las cotizaciones sociales, hasta hace un año, la tasa anual de crecimiento de estos ingresos era inferior al 3%, mientras que en la actualidad aumenta en tasas próximas al 5%. La gran mayoría de los ingresos vienen por cotizaciones de los trabajadores del régimen general, al que pertenecen la mayor parte de asalariados. Estos aportan 48.237 millones, lo que supone un 5,7% más que hace un año. Los autónomos ingresaron 6.758 millones en cotizaciones, con un alza interanual del 2,9%.

De los gastos de la Seguridad Social, más del 80% proviene de prestaciones contributivas, que suben un 3,4% hasta los 65.744 millones de euros. Seis de cada diez euros gastados van a parar a las pensiones de jubilación de los trabajadores que han contribuido al sistema. Entre enero y julio esta partida se llevó 46.981 millones de euros, un 4% más que en 2016. Las pensiones de invalidez subieron un 1,8%, hasta los 6.996 millones; las de viudedad aumentaron un 2%, situándose en 10.721 millones, y las de orfandad (887 millones) crecieron un 1,8%.

Otros gastos importantes fueron los derivados de las bajas laborales, que se han disparado un 10% y supusieron en los siete primeros meses de 2017 un desembolso para la Seguridad Social de 3.261 millones de euros. Las incapacidades derivadas de bajas por enfermedad común ascendieron a 2.840 millones, mientras que las relaciones con accidentes laborales o enfermedades profesionales costaron 388 millones. En el caso de las bajas por maternidad, paternidad y asociadas a riesgos durante el embarazo, el gasto ha subido un 7%, hasta los 1.323 millones de euros.

Más ingresos fiscales

Respecto al déficit del Estado, Hacienda señala que el aumento de los ingresos se ha debido, fundamentalmente, al incremento del 7,1% de los ingresos impositivos, hasta los 86.125 millones. Destaca el crecimiento del Impuesto sobre Sociedades (8.915 millones) en un 36,3% y del IVA (41.468 millones) en un 5,9%. No obstante, el espectacular aumento de Sociedades está muy condicionado por los cambios normativos y la modificación de los pagos fraccionados. El Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) ha elevado su recaudación un 2%, hasta los 19.588 millones.

Estos aumentos se han compensado en parte con el efecto de la liquidación definitiva de 2015 del sistema de financiación regional, que ha supuesto mayores ingresos para las comunidades autónomas respecto a la liquidación definitiva de 2014. En este sentido, las autonomías reciben 9.262 millones, lo que supone un aumento de 640 millones.

En el capítulo de gastos hay un descenso casi generalizado, con una reducción del 5,5% en los intereses y del 10% en la aportación al presupuesto de la Unión Europea. La remuneración de los empleados públicos baja un 4%, ya que en 2016 creció por el efecto de la devolución de la paga extra.