Energía

«El sector de la biomasa está creciendo gracias al boca oreja»

Javier Díaz es Presidente de (Avebiom)
Javier Díaz es Presidente de (Avebiom)larazon

El periodista le pregunta por su trayectoria profesional y su repuesta es rápida: «Soy un creyente de la biomasa». Es más, «soy un apóstol que lleva muchos años predicando sus bondades». Javier Díaz considera que esta tecnología debería tener en un futuro no muy lejano un mayor peso en el mix energético. «Podría tener entre 4.000 y 5.000 megavatios instalados (hoy sólo cuenta con unos 750 en generación eléctrica)».

– ¿Y cómo se le reveló esa fe?

– Llegué a ella de casualidad. Tenía una empresa con varios socios que se dedicaba a planificar y desarrollar potabilizadoras, abastecimientos, depuradoras... y nos presentamos a un concurso para una planta de tratamiento de aguas residuales en Guijuelo (Salamanca). Había que abordar fundamentalmente los residuos procedentes de los muchos mataderos allí existentes. Entonces, empezamos a estudiar y nos fuimos a Dinamarca donde existía una potente industria de porcino. Tuvimos tan buena suerte que contactamos con una ingeniería que se llama Krüger y, tras ver varias alternativas, nos contaron que se acababa de poner en marcha un proyecto fácilmente extrapolable a España: plantas de generación eléctrica con paja de cereal. Fuimos a ver dos de ellas y, efectivamente, eran muy interesantes. Empezamos a estudiar las posibilidades de desarrollar esta tecnología y trabajamos en los 90 en montar una en Salinas de Pisuerga (Palencia), que no salió porque en aquellos momentos hablar de biomasa generaba rechazo popular. Aquello fue el punto de partida y me planteé constituir una organización para crear sector y darla a conocer. En 2004 creamos la Asociación Española de Valorización Energética (Avebiom), de la que soy presidente desde entonces.

– Llama la atención en el nombre la palabra valorización.

– Nosotros ni transformamos ni reciclamos un recurso, sino que lo valorizamos energéticamente.

– ¿Qué representa hoy la biomasa en el conjunto del mercado energético español?

– Muy poco. En la parte de generación eléctrica tenemos en torno a 750 megavatios instalados de un parque de 104.000. Donde sí tenemos una presencia cada vez mayor, aunque todavía escasa, es en el sector térmico, donde la potencia es cercana a 9.500 megavatios.

– ¿Considera satisfactorios los crecimientos en consumo que están registrando?

– La cuota de mercado que estamos alcanzando es razonable teniendo en cuenta nuestra condición. Nos cuesta llegar a la población. Los combustibles fósiles están gestionados por empresas enormes con capacidad para hacer poderosas campañas de publicidad y comunicación. La biomasa está creciendo gracias al boca a oreja. Nuestros consumidores tienen orgullo de pertenencia y, además, presumen de ella.

– ¿Qué autonomías se han enganchado más a la biomasa?

– Hay tres que son líderes indiscutibles: Andalucía, Castilla y León y Galicia. Castilla-La Mancha está cogiendo una velocidad vertiginosa, gracias que su Gobierno ha apostado muy fuerte por ella.

¿Por qué está paralizada la generación eléctrica desde el polémico decreto de 2012?

En nuestro caso, básicamente porque no salen los números. No hay posibilidad de retorno.

– ¿Cuál será, a su juicio, el mix energético del futuro?

– Evidentemente, hay que meter más megavatios de biomasa. El nuestro es el tercer país de Europa en superficie forestal arbolada; nuestros bosques crecen a un ritmo anual de 55-60 millones cúbicos y se están cortando entre 16 y 18 millones, por lo que estamos incrementando la biomasa, lo que hace que cuando se declara un incendio no hay quien lo apague. Todo el mundo está de acuerdo en que hay que actuar en el monte y, desde luego, la biomasa es una buena solución porque, además, ese material se remuneraría. Dicho esto, seguirá creciendo la eólica y retomará la senda del crecimiento la fotovoltaica, y la biomasa podría tener capacidad para contar con hasta 4.000-5.000 megavatios y sustituir una parte importante de lo que representan las centrales térmicas de carbón que se cierren.

– ¿Por qué las renovables no tienen toda la fuerza que se esperaba?

– Las presiones de los combustibles fósiles son muy importantes en todo el mundo. Tanto el sector del gas como el del petróleo cuentan con unas oficinas de «lobbie» importantes tanto en Bruselas como en otros centros de decisión. La burbuja que se creó con la solar ha perjudicado a todas las renovables. Pagar el megavatio a más de 400 euros era una salvajada. Lo que no se hizo bien fue cambiar las reglas de juego cuando ya se había invertido.

– ¿Qué beneficios sociales puede tener la expansión de la biomasa?

– Ya está revitalizando el medio rural. Nuestro sector por cada megavatio instalado crea aproximadamente 3,2 empleos.

EL PERFIL

El presidente de Avebiom habla con pasión. Es un gran convencido de la biomasa desde que la descubrió casualmente en Dinamarca a finales del siglo XX. Desde entonces, la divulga por todos los rincones de España. A él y a su organización les cuesta hacer llegar sus bondades a la población porque no tienen recursos para grandes campañas. No se desanima casi nunca, aunque a veces parezca que predica en el desierto y que sus palabras caen en saco roto.