Grecia

El Tesoro supera las previsiones y coloca 3.510 millones en letras

España ha captado hoy 3.515 millones de euros en letras a tres y nueve meses con fuerte demanda por parte de los inversores, cuyas solicitudes han sido 2,6 veces más de lo adjudicado, y un ligero y previsible incremento en el interés aplicado a nueve meses.

De los 3.515 millones de euros adjudicados hoy, algo por encima del importe máximo previsto, 2.590,70 millones han salido a nueve meses con un interés marginal del 0,56 %, el más alto desde enero; los 924,61 millones de euros restantes, adjudicados a tres meses, se han colocado con una rentabilidad del 0,318 %, inferior a la aplicada en abril (0,34 %).

La ratio de cobertura, que es la proporción entre la demanda de los inversores y el importe finalmente adjudicado, ha sido en esta ocasión muy alta, de 2,6 veces, pues las solicitudes de las entidades alcanzaron 9.340,3 millones de euros.

La posición financiera del Tesoro sigue siendo muy cómoda, ya que en lo que va de año ha captado 68.117 millones de euros dentro del programa de financiación regular a medio y largo plazo, un 51,1 % de la previsión de emisión incluida en su estrategia para 2014 (133.300 millones de euros).

Y ello a un coste medio del 2,01 % con fecha de 30 de abril, inferior al 2,45 % del cierre de 2013.

Los expertos consultados por Efe destacan la demanda frente al marginal repunte del interés.

José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi en España, aclara que la deuda española a corto plazo se coloca a tipos ya muy bajos, "lo que se traduce en subidas y caídas limitadas".

Pero la demanda, prosigue el analista, sigue siendo amplia, "y esto es lo relevante, que se mantiene el fuerte apetito por el riesgo del Tesoro, tanto a corto como a largo plazo".

No obstante, habrá que esperar a la emisión de bonos a cinco y diez años que celebra el Tesoro el próximo jueves para confirmar este interés.

Por lo que respecta a la subida de la rentabilidad de la deuda a nueve meses, Jaime Díez, analista de XTB, señala que los inversores se han mostrado "más cautelosos y han subido la rentabilidad, aunque con una ratio similar a la de la subasta anterior".

Esta preferencia por el corto plazo se ha debido en primer lugar, explica Jaime Díez, a una menor cantidad de volumen emitido y en segundo lugar, a la incertidumbre de los inversores sobre las posibles rentabilidades que ofrecerán los distintos activos en el medio plazo que pueden derivar en una menor inversión para los bonos.

Lo cierto es que el mercado secundario de deuda ha acusado en los últimos días los rumores sobre un supuesto impuesto retroactivo que Grecia querría imponer a los tenedores de deuda extranjeros de deuda del país, información que fue desmentida después.

La prima de riesgo de España, que mide el grado de confianza de los inversores ante la deuda soberana española, se situaba tras la emisión en 170 puntos básicos, uno más que al cierre de la sesión anterior.

El interés del bono español a diez años, cuyo diferencial con el alemán del mismo plazo mide el riesgo país, se mantenía por encima del 3 %.

El próximo jueves, el Tesoro celebra una nueva emisión de deuda, de bonos a cinco años y obligaciones a diez, con la que espera captar otros 3.500 millones de euros.