Turismo

El turismo, un sector fuerte

España ha cerrado un año récord al rozar los 58 millones de turistas
España ha cerrado un año récord al rozar los 58 millones de turistaslarazon

La Organización Mundial del Turismo ha afirmado recientemente que, sea cual sea el ajuste final entre ingresos y gastos, el balance turístico de España es el mejor del mundo, y lo cifra en más de 30.000 millones de euros.

No se equivoca este organismo internacional cuando afirma que nuestro país posee, en el Turismo, una de las industrias más fuertes y capaces para convertirse en ariete de la recuperación económica.

Acabamos de cerrar un año récord en el que hemos rozado los 58 millones de turistas, que gastaron más de 55.000 millones de euros, y nuestras expectativas para 2013 son positivas.

Pero esto no quiere decir que el Turismo lo pueda aguantar todo o que las cifras de éxito de temporadas anteriores nos aseguren el éxito futuro. Todo lo contrario. Hay que esforzarse aún más.

Los fabulosos datos de este sector nos deben concienciar, más, si cabe, de la importancia de un sector que se está comportando de una forma ejemplar en tiempos de crisis.

El trabajo que está realizando el sector privado es encomiable, pero todavía queda mucho por hacer. No se puede reducir el sector a las empresas hoteleras, sino que también forman parte del mismo para ser un destino óptimo las de restauración, de ocio, agencias de viajes, empresas culturales, etc. Sus esfuerzos por mejorar la competitividad, adaptarse a los nuevos tiempos, y superar las dificultades y las vicisitudes de la actual coyuntura son necesarias y merecen no sólo el reconocimiento del Gobierno, sino también el de toda la sociedad.

De ahí la preocupación que mantiene el Gobierno por los últimos acontecimientos que tienen como protagonistas a dos empresas turísticas de gran importancia como son Orizonia e Iberia para que no haya contagio ni se perciba que es el reflejo de todo el sector.

Si bien el Ejecutivo está encima de sendos procesos velando por los derechos de trabajadores y usuarios, creo que, en ambos casos, el escenario viene condicionado por problemas internos de gestión y de adaptación a los nuevos tiempos.

Por un lado, España necesita un sector aéreo potente y, en él, juega un papel fundamental Iberia, por lo que sería muy bueno que la negociación actual entre empresa y sindicatos llegue a un acuerdo lo antes posible que evite los paros anunciados. Nuestro país no se puede permitir esta huelga. Las pérdidas serán millonarias y el perjuicio para el sector turístico y para la imagen del país, también. La principal compañía aérea española debería jugar un papel fundamental en el futuro turístico de España, en el que aspiramos a conseguir la mayor cuota posible de los 1.800 millones de turistas que, según la OMT, viajarán por el mundo en 2020. Pero debe hacerlo adaptándose a las necesidades actuales, manteniendo la conectividad con Latinoamérica, con las islas, Ceuta y Melilla y el hub de Barajas.

Y, por otro lado, nos preocupa igualmente la situación por la que atraviesa Orizonia, una empresa puramente privada que ha llevado a cabo una importante labor en el turismo emisor y en el receptor, pero que ha sufrido las consecuencias de los cambios de hábitos del turista.

Un turista cada vez más independiente y que dispone de más herramientas que nunca. Elige destino, hotel y «hobbies» a través de su dispositivo móvil, su smartphone o su tableta, con lo que al sector no le queda otra que adaptarse. Todos debemos adaptarnos y demostrar el liderazgo de España también aquí. Ser pioneros en la plena integración de las nuevas tecnologías en la oferta turística de nuestro país.

Estos dos casos mencionados no deben distorsionar la imagen de una industria que ha convertido a España en una potencia mundial turística, líder en turismo vacacional, segundo país del mundo en ingresos turísticos y cuarto en número de llegadas. Cifras que son posibles, en gran parte, gracias al sector privado.

Un sector privado que no sólo está vendiendo plazas hoteleras, sino que está transfiriendo también su tecnología y su saber hacer. Tenemos un sector dinámico, competente, moderno que, a pesar de contar con magníficas expectativas, tiene que seguir trabajando en aras de consolidar ese liderazgo de nuestro país.

Junto a la iniciativa privada, el Gobierno de la Nación intentará ayudar creando marcos favorables para el emprendimiento y el desarrollo de proyectos, colaborando más que nunca con el sector.

El Gobierno de España quiere acompañarle a ganar el presente y el futuro, allanar el camino, facilitar la inversión, reducir los trámites porque será así y no de otra forma que el turismo pueda seguir ayudando al país a regresar a la senda de la prosperidad y, sobretodo, de la creación de empleo.

Isabel Borrego

Secretaria de Estado de Turismo