Entrevista

«La energía nuclear es la joya de la corona del sistema eléctrico español»

La necesidad de lograr una autonomía estratégica y de reducir la dependencia de los hidrocarburos rusos ha vuelto a poner sobre la mesa a la gran olvidada en los últimos años: la energía nuclear. El físico Manuel Fernández Ordóñez, desvela en su libro Nucleares: Sí, por favor, editado por Deusto, por qué la energía nuclear es la energía del futuro. Nos recibe en el Hotel Hyatt de Gran Vía.

El físico Manuel Fernández Ordóñez en el hotel Hyatt de Gran Vía 31
Manuel Fernández Ordóñez, autor de "Nucleares: Sí, por favor"Jesús G. FeriaJesús G. Feria

El libro desmonta todos los mitos antinucleares. ¿Por qué se juzga mal a la energía nuclear?

Por intereses deshonestos. Entre ellos, la de los grupos de ecologistas financiados claramente por los «lobbys» del gas y del petróleo a quienes les interesa blanquear ciertas políticas para conseguir el cierre de las centrales nuclerares, que realmente es su enemigo natural. El enemigo de las energías nucleares nunca han sido las renovables, es una falsa dicomotía en la que nos han metido, la competencia directa de la energía nuclear es el gas y los combustibles fósiles. Creo que la energía nuclear es extremadamente positiva para la humanidad.

En su libro habla de falsos mantras antinucleares como creer que las centrales provocan cáncer o que son inseguras, que emiten dióxido de carbono, etc.

Durante muchos años las voces antinucleares han trasladado un mensaje contundente acerca de que las centrales nucleares emitían CO2, lo cual es una obviedad. El problema es que en sus discursos se olvidaban de que el resto de las tecnologías (incluídas las renovables) también lo emiten, y, en muchos casos, mucho más que la energía nuclear. Por tanto, la energía nuclear es una aliado fundamental en la lucha contra el cambio climático.

Fukushima ocasionó 20.000 muertos y Chernóbil es un desierto nuclear.

Fukushima no ocasionó miles de muertos, como mucha gente sigue creyendo en la actualidad. De hecho, por el momento no ha ocasionado ninguno y ya han pasado 12 años. Tuvo grandes consecuencias medioambientales y económicas pero no radiológicas. En cuanto a Chernobil, estamos hablando de una central nuclear que sería ilegal en cualquier país occidental, con un diseño deficiente, con fallos de seguridad obvios que todo el mundo conocía, y aún así seguía operando. La energía nuclear lleva injustamente pagando el estigma de Chernobil durante décadas, cuando las centrales nucleares que tenemos en Europa no se parecen absolutamente en nada. Si Chernobil es algo es una oposición al comunismo y no a la energía nuclear.

¿Está la guerra de Ucrania cambiando la percepción de la gente sobre las nucleares?

Hasta hace un par de años la gente se oponía a la energía nuclear, y con esta esta crisis energética de altísimos precios, de inflación, de pérdida de competitividad de la industria, etc., se está dando cuenta de que la energía nos está haciendo ricos y que disponer de una barata y que esté siempre disponible es lo que nos hace vivir bien. Ahora se está viendo que todo este debate en torno a la energía nuclear igual no es todo lo razonable que se pensaba.

¿Cuántas centrales nucleares quedan en el mundo?

En el mundo 420 aproximadamente, y 50 en construcción. En España nos quedan siete operadores nucleares en acción. Tenemos un calendario de cierre y el primer reactor nuclear tendrá que cerrarse en 2027 y el último en 2035. No tendremos centrales nucleares y quemaremos mucho más carbón.

¿Qué sucederá cuando España se quede sin energía nuclear?

Las centrales nucleares españolas producen más del 20% de nuestra electricidad. Es decir 1 de cada 5 bombillas en España se enciende gracias a la energía nuclear. Por tanto, tenemos unas centrales que funcionan, que son seguras y que nos ayudan en nuestros objetivos energéticos y climáticos, y si las quitamos tendremos que sustituirlas por una cantidad equivalente de electricidad que no tenemos. Por tanto, habrá que hacer unas inversiones que son innecesarias y ese dinero que nos vamos a gastar no lo tendremos para solucionar otros problemas que probablemente sean más urgentes. Luego si me estás diciendo que tenemos un problema climático y de emisiones, habrá que utilizar todas las herramientas que te permitan ir en la dirección de no emitir gases de efecto invernadero y quitar una tecnología que no contamina, por mucho que me digas que luego la vas a cambiar por otra que tampoco emite no es verdad, porque se va a cambiar por gas.

O por energía renovable...

El problema de las renovables es que son intermitentes y cuando no hay sol ni viento no producen. Sobredimensionamos el parque de renovables, pero eso es muy caro y luego qué haces con la energía que te sobra, si se pudiera se almacenaría para utilizarla en los momentos en los que no está disponible, pero como esa tecnología no existe... Por tanto, no podemos hacer política energética hoy con tecnologías que no existen todavía. Hay que quedarse con lo que tenemos y por tanto cerrar centrales nucleares, que son la joya de la corona del sistema eléctrico español, para que la base del sistema eléctrico español siga siendo el gas, no parece muy razonable.