España debe fijar ya su posición sobre el dinero de la PAC

El primer reto al que debe enfrentarse el Gobierno de Pedro Sánchez al comenzar este nuevo curso de política agraria es fijar la posición que mantendrá España en las negociaciones sobre el Marco Financiero de la Unión Europea para el periodo 2021-27. ¿Se opondrá el Gobierno de Madrid al recorte de los fondos de la Política Agrícola Común (PAC) que ha planteado la Comisión Europea y que estuvo inspirado por el equipo de la actual ministra de Economía, Nadia Calviño, cuando era directora general de Presupuesto del Ejecutivo comunitario o, por el contrario, cederá en el dinero de la política agraria a cambio de recibir más para la inmigración, por ejemplo? Esa es la gran duda en estos momentos, porque el presidente Sánchez no ha fijado su posición en este asunto de forma clara como sí lo hizo en su momento Mariano Rajoy y también el presidente francés Emmanuel Macron.

La negociación presupuestaria es uno de los grandes retos de este curso político en la Unión Europea, en el que además comenzará el proceso negociador de la futura PAC, tras la presentación por parte de la Comisión Europea de sus propuestas a principios de junio. Y todo ello prestando atención a otro proceso negociador, el que tiene lugar entre Bruselas y Londres para pactar las condiciones del Brexit, cada día más complicado. Las relaciones comerciales con los Estados Unidos de Trump, las negociaciones con los países de Mercosur para cerrar un vasto acuerdo de asociación y las que acaban de comenzar con Australia y Nueva Zelanda serán otros asuntos de gran importancia para los intereses de los agricultores y ganaderos comunitarios durante los próximos doce meses, que estarán marcados, a su vez, por las elecciones al Parlamento Europeo. Los transgénicos, la polémica sobre el glifosato, el herbicida más utilizado el mundo, el Plan Proteínas y la expansión de la Peste Porcina Africana (PEPA) serán otras cuestiones a tener en cuenta en este curso.