¿Tus superiores te tratan con desprecio o te ignoran? ¿Han cambiado tus responsabilidades para que te sientas inútil o, al contrario, quemado? Puedes estar sufriendo un despido silencioso, una práctica ilegal y discriminatoria que tiene como objetivo conseguir la renuncia del trabajador para evitar tener que pagar la indemnización por despido. Según explica Mapfre en su blog "Jubilación y pensión", el despido silencioso podría considerarse una forma de acoso laboral y puede reclamarse por vía legal.

-Aislamiento: te ignoran o excluyen de conversaciones, reuniones o eventos relacionados con el trabajo. También lo hacen en los espacios de socialización, como en la cafetería, y en los encuentros fuera del trabajo.

-Cambio de responsabilidades: te asignan menos proyectos o por el contrario, más carga de trabajo, sin consultar ni informar con antelación.

-Falta de apoyo y recursos: no te ofrecen ayuda o el apoyo necesario para desempeñar tus tareas y si lo reclamas, te ignorar o responden mal.

-Críticas: señalan tus errores constantemente, te atribuyen problemas que no te corresponden y hacen comentarios negativos.

Cómo proceder

El primer paso y más importante: guarda todas las pruebas (correos, mensajes, testigos, lista de incidentes...) que evidencien este trato inadecuado. Para intentar solventar la situación puedes acudir a Recursos Humanos; presentar una queja formal o seguir los procedimientos establecidos para informar sobre posibles abusos laborales o trato injusto; y por último, buscar asesoramiento para tomar acciones legales.