Hipotecas
El euríbor cierra septiembre en el 2,936%: baja del 3% por primera vez desde noviembre de 2022 y abarata las hipotecas en hasta 2.400 euros
La caída del indicador al que están referenciadas las hipotecas variables abarata las cuotas entre 100 y 200 euros mensuales. En tasa diaria está ya en el 2,75% y los expertos prevén que cierre el año en el 2,5%
Tras un mes de mínimos anuales sucesivos, el euríbor a doce meses se anota en septiembre su mayor hito en casi dos años: la tasa media mensual se sitúa en el 2,936%, por debajo del 3% por primera vez desde noviembre de 2022 (2,828%). El indicador al que están referenciadas la mayoría de las hipotecas variables en España da así un nuevo respiro -el sexto consecutivo- a los bolsillos de muchos hipotecados, que verán cómo sus cuotas mensuales se reducen de manera significativa. De hecho, en tasa diaria arrancará octubre en el 2,75%.
Respecto al dato mensual de agosto (3,166%), el euríbor experimenta un retroceso de 0,23 puntos porcentuales. En comparación con hace un año, cuando el indicador alcanzó el 4,149%, la reducción es aún mayor, de 1,213 puntos. Esta nueva caída del euríbor permitirá a aquellos que revisen sus hipotecas ahora beneficiarse de una rebaja mensual en sus cuotas, que podría oscilar entre los 100 y 200 euros mensuales.
El impacto de esta caída será particularmente notable en los hogares con hipotecas de mayor importe. Por ejemplo, en el caso de un préstamo de 150.000 euros a 25 años, con un diferencial del 1% sobre el euríbor, la cuota mensual se reducirá en más de 100 euros, con un ahorro anual superior a los 1.200 euros. En créditos de 300.000 euros a 25 años, el ahorro mensual podría superar los 200 euros, lo que supondría un respiro anual de más de 2.400 euros.
Simone Colombelli, director de Hipotecas del comparador iAhorro, destaca que el euríbor "está bajando más y más rápido de lo esperado". Desde julio de este año, asegura Colombelli, el índice ha cambiado su rumbo "por completo", iniciando una tendencia a la baja que podría continuar hasta alcanzar el entorno del 2% en la segunda mitad de 2025.
Miquel Riera, analista de HelpMyCash, señala que el euríbor llegó a superar el 4% en el verano de 2023, pero ha dado un giro "de 180 grados" gracias a la política monetaria del BCE, que busca moderar la inflación sin desestabilizar el crecimiento económico. En concreto, el BCE recortó los tipos de interés un cuarto de punto este mes de septiembre, la segunda rebaja de tipos en lo que va de año y no se descarta que haya alguna más antes de que cierre el ejercicio. Ante este escenario, el comparador prevé que el euríbor pueda terminar el año entre el 2,5% y el 2,75%, lo que supondría un alivio continuado para los titulares de hipotecas variables.
Por su parte, el analista Manuel Pinto destaca que los recientes recortes de tipos del BCE y los malos datos macroeconómicos de la región empujan al euríbor a sus mínimos de los últimos 21 meses. Pinto prevé que la tendencia a la baja del indicador se mantendrá en las próximas semanas hasta alcanzar niveles cercanos al 2,5%, aunque advierte que los riesgos inflacionarios podrían limitar futuros descensos.
"Los recortes de tipos a nivel global, la evolución de los servicios, los estímulos monetarios en China, y el efecto base comparativo en la caída de los precios energéticos, pueden ofrecer nuevas alzas en la inflación que limite las futuras decisiones de los bancos centrales, principalmente en el caso del BCE, cuyo principal objetivo es la estabilidad de los precios", señala.
A nivel internacional, los movimientos de otros bancos centrales, como la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, también influirán en el rumbo del euríbor. La Fed podría ejercer presión sobre el BCE para que adopte recortes de tipos más agresivos, aunque esto dependerá en última instancia de la evolución de la inflación y de la estabilidad económica global.
En cualquier caso, los expertos de Ebury señalan que la debilidad económica europea, en particular la del sector industrial alemán, podría acelerar las bajadas de tipos por parte del BCE, lo que seguiría empujando al euríbor a la baja. Esta tendencia, reflejada ya en la importante reducción del índice en septiembre, se mantendrá, al menos por el momento, ofreciendo alivio a quienes más lo necesitan.
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