Consejo de Ministros

El Gobierno hará permanente el impuesto a la banca y las energéticas a partir de 2025

Las compañías podrán deducirse las inversiones estratégicas que realicen en España con el objetivo de que el tributo pueda ser permanente después de 2025

"Se van a prorrogar por un año los gravámenes tanto del servicio financiero como energético". De esta manera, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha puesto fin a las dudas sobre la continuidad de estos gravámenes y ha cedido ante las exigencias de su socio de Gobierno, Sumar, para que se mantengan en el tiempo, después de 2024. Por tanto, el tributo se mantiene como extraordinario y temporal más allá de los dos años previstos y tendrá vida 365 días más, antes de hacerse permanente.

Esta decisión se ha tomado por el Consejo de Ministros dentro del nuevo paquete de medidas anticrisis, por el que las entidades financieras y las compañías energéticas del país ya saben que tendrán afrontar ese pago también en 2025 -sobre las cuentas de 2024-, que seguirá siendo un tributo configurado para gravar los "beneficios extraordinarios" por la subida de los tipos de interés y el incremento del precio de la electricidad.

Aunque la situación del gravamen de la banca no ha sufrido cambios significativos -salvo que realicen inversiones denominadas estratégicas-, en el caso de las energéticas sí que va a sufrir varias modificaciones, la más importante centrada en que las compañías afectadas podrán deducirse estas inversiones estratégicas desde el 1 de enero, lo que facilitaría que este impuesto consolide su carácter permanente a partir de 2025.

Sánchez ha explicado que se van a introducir modificaciones en la Ley General de Presupuestos para que se puedan deducir desde el 1 de enero las inversiones estratégicas vinculadas con proyectos industriales y con la descarbonización del sistema productivo en el país. También ha dejado claro que la revisión en el año 2024 de esta figura tributaria provocaría que ya se consolidara "con un carácter permanente". Así, ha incidido en que "el impuesto fue diseñado con una pervivencia de dos años, vencería el 31 de diciembre de este año y, por tanto, lo que hemos hecho ha sido garantizar su pervivencia a partir del año 2024, una vez ya revisado".

Estos dos impuestos han sido buena parte de la causa de la falta de acuerdo entre PSOE y Sumar para cerrar el paquete de medidas anticrisis. El de la banca era el que había generado más choque entre las vicepresidentas Nadia Calviño, que anunció que se revisaría, y Yolanda Díaz, que respondió que deben mantenerse.

Sobre el sector financiero, Sánchez también anunció que se eliminarán las comisiones bancarias por retirada de efectivo en ventanilla para personas con discapacidad y mayores, lo que calificó de medida "inequívoca de justicia social". Calviño ya avanzó la semana pasada que se prohibirían, después de reunirse con la banca, los usuarios y los mayores para ampliar las medidas hipotecarias a familias de hasta 38.000 euros de renta anual.