Banco de España

Hogares y empresas se preparan: la riqueza de las familias sube casi un 2,9% y la deuda de empresas baja al 70% del PIB

La riqueza de los hogares supera los dos billones de euros y su deuda se reduce en 8.900 millones en el último año

El temor a una nueva crisis, la presión de la inflación sobre los precios y el incremento general de costes ha provocado que hogares y empresas hayan decidido elevar sus activos financieros y reducir su deuda de forma muy significativa, aunque ésta última todavía está por encima de niveles prepandemia. Así, la riqueza financiera neta de las familias españolas superó los dos billones de euros en el primer trimestre del año, lo que supone un aumento del 2,9% en tasa interanual, mientras su deuda se ha moderado hasta el 51,1% del PIB, frente al 56,8% de marzo de 2022. En cuanto a las empresas, la deuda de las sociedades no financieras disminuyó desde el 78,5% en marzo de 2022 hasta el 70% del PIB a comienzos de 2023, lo que serían en torno a 20.000 millones.

Así lo determina el último informe sobre las Cuentas Financieras publicado por el Banco de España, que muestra que la cifra de los activos financieros netos de las familias a cierre del primer trimestre equivale al 147% del PIB, ratio que fue 9,9 puntos inferior a la de un año antes, aunque el supervisor estima que no se debió a una disminución real de activos, sino al aumento que experimentó el PIB. Por eso, el saldo total de activos financieros de los hogares -correspondiente a dinero en efectivo, depósitos, acciones y valores en renta- alcanzó en el primer trimestre niveles máximos, 2,75 billones de euros, con un crecimiento del 1% en el primer trimestre y un 1,7% más que un año antes, lo que refleja una revalorización de 15.300 millones, con un aumento neto de adquisición de activos financieros de 31.900 millones de euros en los últimos cuatro trimestres -de marzo de 2022 a marzo de 2023-.

El grueso de los activos financieros de los hogares volvió a ser el efectivo y los depósitos (el 38% del total), participaciones en fondos de inversión (15%) y seguros y fondos de pensiones (12%). Las participaciones en el capital (31%) fue el instrumento que más incrementó su peso en los activos financieros de los hogares -en 1,2 puntos porcentuales con respecto a un año antes-, mientras que el peso de los seguros y fondos de pensiones fue el que más cayó (-1,2 puntos), presionado por el menor interés por los planes de pensiones personales tras el cambio legislativo impulsado por el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá.

Respecto a la deuda, tanto empresas como hogares contribuyeron a su bajada. En términos globales, la deuda consolidada alcanzó los 1,648 billones de euros, un 1,7% menos en comparación interanual, pero un 2,3% superior a niveles del nivel de finales de 2019, antes de la pandemia. Sin embargo, en términos del PIB, la ratio conjunta sí indica una clara moderación del endeudamiento hasta el 121,1%, frente al 135,3% de marzo de 2022, situándose también por debajo del 129,3% de finales de 2019.

Especialmente significativa fue la bajada de la deuda consolidada de las sociedades no financieras, que se redujo en más de 20.000 millones, desde los 972.300 millones de euros en el primer trimestre de 2022 a los 952.700 millones en marzo de 2023. En términos del PIB la ratio disminuyó desde el 78,5% en marzo de 2022 hasta el 70% a comienzos de 2023 -el Banco de España señala que la ratio subiría al 89,9% si se incluyese la deuda interempresarial, frente a 101,5% un año antes. En cuanto a la deuda de los hogares, ésta se redujo en 8.900 millones, para pasar de 703.800 millones a 694.900 millones en los cuatro trimestres. La ratio sobre el PIB disminuyó hasta el 51,1% en el primer trimestre de 2023, desde el 56,8% de un año antes.

Las operaciones financieras netas de empresas, hogares, instituciones financieras y Administraciones Públicas mostraron en los últimos cuatro trimestres se elevaron a 35.600 millones de euros, equivalente al 2,6% del PIB, frente al 1,5% del PIB observado un año antes. La financiación neta captada por las Administraciones Públicas en términos del PIB se situó en el primer trimestre de 2023 en el -4,3%, frente al -5,4% de marzo de 2022, aunque aún supuso mayor financiación que la captada en diciembre de 2019 (-3%). La que solicitaron los hogares se redujo hasta el 1% del PIB, desde un 3,5% un año antes, mientras que las operaciones de las sociedades no financieras aumentaron hasta el 3,2% (frente a un 0,7% de un año antes), mientras que las de las instituciones financieras se situaron en el 2,8% del PIB, muy similar al 2,7% del año anterior