Aerolíneas
IAG sale de pérdidas y gana 921 millones hasta junio
Los ingresos del grupo también han reflejado este regreso a beneficios, ya que en el primer semestre de 2023 se elevaron hasta 13.583 millones de euros, un 45,3% más
International Airlines Group (IAG), el holding hispano-británico que engloba a British Airways, Iberia, Vueling, Aer Lingus y Level, deja atrás las nubes negras y cierra el primer semestre del año con unos beneficios netos de 921 millones, haciendo que las pérdidas de 654 millones de euros registradas en el mismo periodo de 2022 parezcan tan solo un mal sueño. Y es que, la fuerte demanda sostenida –con un rendimiento especialmente superior en las actividades españolas–, es la responsable de impulsar estas cifras positivas en toda la red. Tanto es así, que Iberia, se anotó entre abril y junio el beneficio trimestral más alto de su historia, 307 millones de euros, según ha informado este viernes el grupo a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Los ingresos del grupo también han reflejado este regreso a beneficios, ya que en el primer semestre de 2023 se elevaron hasta 13.583 millones de euros, un 45,3% más que un año antes; ingresos de los cuales, 7.694 corresponden al segundo trimestre. En esta linea, los ingresos unitarios de pasaje del primer semestre fueron un 18,4% superiores a los del mismo periodo de 2022. "Los ingresos unitarios se ven impulsados por la fuerte demanda de ocio en toda la red, mientras que el negocio se recupera lentamente a lo largo del semestre", explica IAG en un comunicado.
El beneficio de operaciones (antes de partidas excepcionales) de IAG también ha logrado regresar a sendas positivas, ya que ascendió hasta 1.260 millones de euros, frente a las pérdidas de 446 millones de euros registradas en el primer semestre de 2022, aumentando así 1.706 millones.
Reducción de la deuda neta y los costes
La deuda financiera neta del grupo también ha mostrado una evolución positiva, ya que esta ha pasado de 10.979 a cierre del primer semestre de 2022 a 7.613 en el mismo periodo de ese año. Esta mejora de la tesorería ha sido impulsada por un fuerte ebitda, así como "la entrada de capital circulante procedente de las reservas de pasajeros (que se espera que desaparezca en su mayor parte en la segunda mitad del año)", explica el grupo. La deuda neta sobre ebitda antes de partidas excepcionales fue de 1,5 veces, frente a 3,1 veces en 2022.
IAG destaca las "alentadoras" perspectivas para el verano, ya que las reservas cubren alrededor del 80% de los ingresos previstos del tercer trimestre; además, se ha restablecido el 94% de la capacidad de 2019, medidas en asientos por kilómetro ofertados (AKO), lo que corrobora una demanda "sólida".
Los gastos aumentaron un 26,2%, hasta los 12.323 millones de euros, sobre todo por el combustible y derechos de emisión, que aumentaron un 38,3% y llegó a los 3.550 millones de euros en el semestre.
Los costes unitarios –excluido el combustible–, se redujeron un 7,3% frente al primer semestre de 2022, impulsados por un aumento de la capacidad de pasajeros del 30,9%.
El coste unitario del combustible aumentó un 5,7% frente a 2022, a raíz de unos precios medios efectivos del combustible más elevados, netos de coberturas y a los efectos beneficiosos derivados de las entregas de aviones más eficientes a IAG durante los últimos años. Por su parte, el margen de las operaciones antes de partidas excepcionales fue del 9,3% en el primer semestre y del 16,3% en el segundo.
El consejero delegado del grupo, Luis Gallego, ha señalado que estos resultados se deben al "buen comportamiento de todas las aerolíneas" y que su intención es volver a la capacidad anterior a la pandemia a finales de año. "Los sólidos beneficios desde principios de año nos están ayudando a financiar inversiones para nuestros clientes y a mejorar nuestro balance mediante la reducción de deuda", ha agregado Gallego.
Perspectivas de futuro
La compañía espera que para el cierre de 2023 la capacidad se sitúe en torno al 97% de los niveles previos a la pandemia.
A pesar de que "no hay indicios de debilidad en las reservas anticipadas", el grupo es consciente de "las incertidumbres generales que podrían afectar al ejercicio" como la volatilidad geopolítica y macroeconómica en el precio del combustible, la confianza del consumidor, además de otros factores externos como las huelgas, sostiene IAG en el comunicado.
Asimismo, el volumen de reservas para el último trimestre ronda el 30%, algo "normal" a estas alturas del año. En cuanto a la compra de Air Europa, pendiente de las autorizaciones necesarias, IAG confía en que se produzca en un plazo de entre 18 y 24 meses desde su anuncio en febrero de este año.
