Independentistas y podemitas, a las puertas del diálogo social

La configuración del diálogo social puede cambiar en la próxima legislatura tras más de 40 años con los mismos actores si el Gobierno de coalición PSOE-Sumar logra repetir legislatura. El pacto rubricado entre ambas formaciones cambiará las reglas de representatividad entre empresarios y sindicatos, y puede desequilibrar definitivamente la balanza en contra de una CEOE que se quedaría más sola junto a Cepyme. Sobre todo porque este punto del acuerdo tiene ya nombres propios: Conpymes y Pimec. Los primeros son la patronal más cercana a lo que antes era Podemos y ahora es Sumar –la propia Yolanda Díaz hizo de maestra de ceremonias en su puesta de algo–, y la segunda ha reconocido públicamente su vinculación y apoyo al independentismo catalán.

En concreto, y según reza el texto aprobado esta semana, «se desarrollarán las reglas de representatividad empresarial, especialmente las relativas a la mayor representatividad de las pymes en el ámbito del diálogo social, la negociación colectiva y la participación institucional». También pretende impulsar «una ley de participación institucional que regule la presencia de los interlocutores sociales en los diversos órganos de las Administraciones Públicas». Toda una declaración de intenciones de cambiar las reglas y justificar las cesiones que exige el independentismo para dar su apoyo a la investidura.

La organización que preside José María Torres ya ha mostrado su disposición a postularse como uno de los nuevos agentes sociales para «corregir» la falta de representatividad en el diálogo social de las pequeñas y medianas empresas –obviando que Cepyme, la principal organización de estas empresas, forma parte de la Mesa de Diálogo–, aplaudiendo que, finalmente, se haya introducido en la agenda política esta posibilidad. Para Conpymes este punto del acuerdo es «coherente con las recomendaciones de la Comisión Europea», que en enero de este año emitieron una petición sobre el refuerzo del diálogo social en la UE, y se «equipararía a las pymes españolas con las del resto de Europa en materia de representatividad».

Conpymes es un proyecto ideado hace cinco años y que ha tenido en la Plataforma Pymes –que se creó en 2018– su punto de referencia y su sipporte de despegue, siempre bajo el auspicio de Podemos, antes, y ahora de Sumar.

La inclusión de esta organización en el diálogo social llevaría aparejada la inclusión de Pimec en la ecuación. Como primer paso, la patronal adscrita al independentismo catalán e integrada en Conpymes ha abierto una delegación en Madrid con el «objetivo de defender los intereses de las pymes catalanas y reclamar su espacio en el diálogo social», dijeron en su presentación. Para ello, han puesto al frente al exdiputado del PDeCat, Ferran Bel, muy próximo a Carles Puigdemont, quien será el representante permanente y encargado de «fortalecer la presencia e influencia de la patronal de pymes catalanas en la capital española, mantener las relaciones institucionales y detectar oportunidades para aumentar la visibilidad y reputación de Pimec en el ámbito nacional», incidieron.

Pedro Sánchez y Yolanda Díaz se asegurarían así otro punto más de apoyo a su favor en el diálogo social y se haría efectiva una concesión más al independentismo para buscar su apoyo en la investidura.