Ministerio de Industria

Industria eleva a 53.000 los británicos afectados en España por la quiebra de Thomas Cook

España estudia poner en marcha un plan de contingencia para el sector turístico

La ministra de Industria, Reyes Maroto, en la reunión de hoy
La ministra de Industria, Reyes Maroto, en la reunión de hoylarazon

España estudia poner en marcha un plan de contingencia para el sector turístico.

La ministra de Industria en funciones, Reyes Maroto, ha asegurado que la quiebra del turoperador Thomas Cook ha afectado a 53.000 británicos en España, por lo que solicitará a Gran Bretaña que refuerce su plan de contingencia para repatriar a sus ciudadanos. Maroto ha abogado por la creación de un plan de contingencia para España con extensión al Reino Unido para “compartir información sobre la incertidumbre de los datos con mayor rapidez y claridad”. El Gobierno se ha comprometido a convocar una comisión interministerial de turismo que, según Maroto, "va a permitir abordar todas las aristas que tiene la quiebra de la compañía, que no es solo la urgencia, sino otros factores que tienen que ver con la situación financiera de las empresas, y de forma importante, asegurar la conectividad para no perder todo el volumen de turistas que hasta diciembre y la siguiente temporada tenían comprometido su viaje con Thomas Cook".

Maroto ha explicado que la jornada de ayer se gestionó de una forma “muy adecuada”. Aunque se cancelaron 46 vuelos, se pusieron a disposición de los afectados 18, lo que ha permitido a 15.000 de ellos retornar a sus casas. Igualmente, la ministra ha recalcado que “no han habido reclamaciones, por parte de los afectados, puesto que se les ha dotado en todo momento de información disponible”.

En cuanto a las perdidas económicas en el sector turístico, la ministra ha señalado dos tipos. “Uno es la deuda que ahora mismo tiene contraída Thomas Cook con los hoteleros españoles, cuya cifra se eleva a 200 millones”, aunque por el momento, ha añadido, “estamos clarificando este dato”. Otra, ha proseguido, son las pérdidas económicas que golpearán directamente al sector turístico español y a toda su cadena de valor, que todavía no han sido cuantificadas.

El turoperador británico Thomas Cook, que puso fin a sus 178 años de historia en el sector este lunes, además de haber dejado en tierra a 600.000 viajeros de todo el mundo, ha supuesto un golpe fuerte para España. Concretamente, para los principales destinos turísticos de Baleares, Canarias, Andalucía, Cataluña y Valencia, que han estado representados en la reunión de hoy.

La consejera del Gobierno canario, Yaiza Castilla, ha incidido en que se trata de “la mayor crisis turística” que ha tenido el archipiélago. Actualmente, el dato que ha proporcionado la ministra en funciones, Rayes Maroto, ha sido de 35.000 afectados en las Islas Canarias. Castilla ha recordado que las islas canarias comenzarán su temporada alta el 1 de octubre, por lo que “es necesario mitigar esta crisis y establecer las reuniones de trabajo correspondientes”.

Según informó ayer el sindicado UGT, en Canarias 12.000 empleos podrían peligrar a corto-medio plazo, el 10% de todos los puestos de trabajo del sector hostelero en las islas. Además, uno de cada cuatro turistas extranjeros que llegaban a Canarias lo hacían a través de Thomas Cook, el 25%, unos 3,45 millones de viajeros al año, han señalado las patronales del sector en Canarias.

Para Baleares, se trata de una afectación “muy importante puesto que estamos terminando nuestra temporada alta y tenemos expuesta una cantidad de recursos de nuestras empresas”, ha asegurado el consejero de Modelo Económico, Turismo y Trabajo de Baleares, Iago Negueruela. No obstante, “tenemos que reforzar los mecanismos de contingencia y tener claras las cifras de los turistas que tenemos en España”, ha añadido. “Ante una crisis excepcional hay que tomar medidas excepcionales, y la protección de la industria turística es muy importante, principalmente, por las aportaciones que se realizan al PIB desde cada uno de los archipiélagos”, ha asegurado.