Economía

La inversión en IA supera los 124.000 millones de dolares

La IA agéntica emerge como una de las tecnologías de mayor crecimiento, con 1.100 millones de dólares en inversión de capital en 2024, según McKinsey Technology Trends Outlook 2025

La inversión en IA supera los 124.000 millones de dólares, según McKinsey & Company
La inversión en IA supera los 124.000 millones de dólares, según McKinsey & CompanyDifoosion

El informe McKinsey Technology Trends Outlook 2025 señala a la Inteligencia Artificial (IA) como el principal motor de la transformación tecnológica mundial, tras captar más de 124.300 millones de dólares en inversión de capital durante 2024.

La consultora identifica 13 tendencias que marcarán el futuro de los negocios, entre las que destacan la IA agéntica (un tipo de inteligencia artificial diseñada para actuar de manera más autónoma que los modelos tradicionales), los semiconductores especializados, la computación en la nube y edge computing, la ciberseguridad, las tecnologías cuánticas, la bioingeniería, la movilidad del futuro y las energías sostenibles.

El estudio refleja una recuperación de la inversión tras la caída de 2023, con especial dinamismo en la energía y la sostenibilidad, la bioingeniería y la movilidad eléctrica. En este último ámbito, el mercado muestra un comportamiento dispar: mientras Europa reduce los precios de los vehículos eléctricos y China acelera sus ventas, Estados Unidos experimenta una ralentización por la retirada de incentivos fiscales.

Uno de los fenómenos más disruptivos es la IA agéntica, que ya atrae miles de millones en capital y multiplica por diez la demanda de talento especializado. Aunque aún se encuentra en fase experimental, promete revolucionar sectores como la ciberseguridad, las finanzas y el soporte empresarial.

El informe también subraya la fortaleza de otras áreas, como los semiconductores específicos, con un crecimiento de casi el 100 % en un año, y la realidad inmersiva, que se extiende más allá del entretenimiento hacia campos como la salud y la formación.

Pese al dinamismo inversor, McKinsey advierte de retos que pueden frenar la adopción de estas tecnologías: la escasez de chips, el elevado consumo energético de los centros de datos y la creciente competencia internacional. En conjunto, las tendencias apuntan a un futuro de innovación acelerada que exigirá replantear modelos energéticos, industriales y regulatorios.