La avalancha de bajas laborales golpea las cuentas de las mutuas

El disparado incremento que están experimentando los casos de incapacidad temporal y de absentismo laboral al hilo de la recuperación económica amenaza con llevarse por delante las cuentas de las mutuas de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales en España. Según fuentes del sector, 16 de las 20 entidades de este tipo que operan en nuestro país perdieron dinero en la gestión de las contingencias comunes en 2015 ante la avalancha de bajas laborales que se produjo.

En concreto, el resultado económico de las mutuas en dichas prestaciones tuvo un signo negativo conjunto de 104,49 millones de euros. Esta cifra contrasta con los datos de 2014, ejercicio en el que las bajas laborales empezaron a repuntar tras la caída que se produjo durante los años más duros de la crisis, y en el que el sector alcanzó un resultado positivo de 136,58 millones de euros en la gestión de las ya citadas contingencias. Si se comparan los resultados de 2014 y de 2015, el descenso total sufrido por estas asociaciones de empresarios que colaboran con la Seguridad Social fue de 241,07 millones.

Pérdidas en 16 mutuas

De acuerdo con las mismas fuentes, los resultados negativos de 2015 «han podido ser compensados con el saldo acumulado por las mutuas en la correspondiente Reserva de Estabilización de Contingencias Comunes y, en su caso, mediante la aplicación de la Reserva Complementaria». No obstante, alertan de que en caso de continuar esta situación, «la Reserva se agotará en los siguientes ejercicios, lo que supondrá que ese déficit tendrá que ser compensado, en última instancia, con la Reserva de Estabilización de Contingencias Profesionales y, si ésta fuera insuficiente, se aplicaría la responsabilidad mancomunada de las empresas, lo que pondría en serias dificultades a las mutuas correspondientes».

¿Qué ha pasado para llegar a esta situación? Tal y como adelantó LA RAZÓN, los indicadores de gestión del absentismo por Incapacidad Temporal por contingencias comunes son demoledores a partir de 2014, agudizándose en 2015. El pasado año, se produjeron 3.934.380 procesos de este tipo, un 10,23% más que en 2014, cuando la población protegida sólo había crecido un 3,44%, hasta los 15,6 millones de trabajadores. Estas cifras dispararon el gasto en prestaciones económicas por dichos procesos a cargo de las mutuas hasta los 5.135 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 8,16%. De acuerdo con las cifras que maneja el sector, el coste directo para las empresas causado por las bajas laborales fue de 3.827,25 millones , y el coste de oportunidad en términos de bienes y servicios que se dejaron de producir ascendió a 52.387,15 millones . A tenor de ello, el coste total del absentismo por incapacidad temporal se elevó el pasado año a 61.300 millones de euros, lo que supone un incremento del 10,11% con respecto al ejercicio de 2014. De esta forma, el coste por trabajador afiliado por estas prestaciones se ha incrementado un 4,56% de media.