Actualidad

Vivienda

Los alquileres de Airbnb, en el radar de Hacienda desde el 1 de enero

La plataforma de casas turísticas compartirá con la Agencia Tributaria los datos de sus anfitriones y sus transacciones. Los usuarios dispondrán en su perfil de una herramienta específica para simplificar el envío de información al fisco

Los alquileres de Airbnb, en el radar de Hacienda desde el 1 de enero
Los alquileres de Airbnb, en el radar de Hacienda desde el 1 de enerolarazon

Los usuarios dispondrán en su perfil de una herramienta específica para simplificar el envío de información al fisco

Desde el próximo 1 de enero, Hacienda conocerá de primera mano los datos de los anfitriones que alquilen sus casas a través de Airbnb. Así se lo comunicó ayer la plataforma a estos usuarios, cuyas transacciones pasarán a estar fiscalizadas por la Agencia Tributaria, que vigilará de este modo el cumplimiento de las obligaciones tributarias. «El 1 de enero entrará en vigor la obligación de que las plataformas compartan los datos de las reservas de los anfitriones. A partir de esa fecha, Airbnb compartirá con la Agencia Tributaria la información que tenga disponible sobre las transacciones de los anfitriones desde 2018», señaló la compañía.

Airbnb comunicó a estos anfitriones que ha implementado una herramienta para que sea fácil proporcionar la información que las autoridades fiscales requieren. Esta herramienta es accesible de manera individual por cada anfitrión desde su perfil. La información que compartirá con las autoridades fiscales incluye los ingresos de los anfitriones y detalles de sus anuncios, como el nombre y la dirección. La plataforma se ha asociado con la Asociación Española de Asesores Fiscales (AEDAF) para ayudar a los anfitriones con sus obligaciones fiscales. También se ha asociado con la consultora PwC para proporcionar una guía de impuestos, así como una línea directa gratuita para obtener información fiscal adicional.

«La ley en España está cambiando y queremos trabajar con los anfitriones para ayudarles a contribuir en la parte que les corresponde y hacer que el proceso del impuesto sobre la renta sea simple para todos», dijo el director de políticas públicas de Airbnb, Patrick Robinson. Según la compañía, los anfitriones se quedan con hasta 97 céntimos de cada euro del precio por compartir su casa. Airbnb insiste en que «siempre ha recordado a los anfitriones que verifiquen y cumplan con las normativas fiscales que les sean de aplicación a través de recordatorios de correo electrónico regulares y en las páginas de alojamiento responsable».

El pasado mes de mayo, el Ministerio de Hacienda decidió dar algo más de margen a las nuevas plataformas de pisos turísticos como Airbnb, HomeAway, Wimdu o Niumba, retrasando el plazo inicial de octubre para suministrar los datos fiscales hasta el 31 de enero de 2019. Para el ejercicio 2018 la presentación de esta declaración informativa de la cesión de viviendas con fines turísticos tendrá «excepcionalmente» carácter anual. En el resto de ejercicios, la declaración informativa será trimestral.