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Los mayores accionistas de BPA exigen anular el plan de resolución del banco
Los Cierco consideran que Andorra actúa con «opacidad» contra sus intereses
Los accionistas mayoritarios de Banca Privada de Andorra (BPA), los hermanos Higini y Ramón Cierco, han solicitado a la Batllia –primera instancia judicial de Andorra– que anule el plan de resolución de la entidad aprobado por la Agencia Estatal de Resolución de Entidades Bancarias (AREB). Los Cierco han presentado una demanda ante el Tribunal de Batlles de Andorra en la que piden también la anulación de la valoración económica de BPA y del acuerdo por el que se aprueba la constitución del banco puente Vall Banc, que aglutina los activos y pasivos legítimos de BPA. Esta entidad fue intervenida hace más de cuatro meses y su tutela la ha asumido la AREB, organismo similar al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) español.
Los Cierco consideran que la AREB está actuando con «opacidad» y contra sus intereses, y están dispuestos a emprender acciones legales contra el Estado andorrano para reclamarle los daños y perjuicios que, en su opinión, les ha causado la «expropiación injustificada» de la entidad.
Los Cierco, propietarios del 75% de las acciones, han interpuesto esta demanda para impugnar tres actos administrativos adoptados por la AREB, para que queden en suspenso mientras se decide sobre la nulidad de pleno derecho que invocan, según han informado en un comunicado. Argumentan que el plan de resolución de BPA «no ha sido nunca notificado a los accionistas y ni siquiera se ha publicado íntegramente en ninguna parte», por lo que «se desconoce su contenido».
En cuanto a la valoración económica de BPA –un valor económico en el escenario de resolución de -103,1 millones de euros y un valor liquidativo de -374,4 millones–, los Cierco consideran que los cálculos carecen de toda base documental y denuncian que la AREB nunca ha dado a conocer los criterios contables que ha seguido para valorar la entidad. Al mismo tiempo, los accionistas mayoritarios consideran imposible que en tres meses –la valoración se hizo con datos obtenidos el 31 de mayo– el banco se haya desvalorizado tanto. «Esto sólo sería posible si se hubiera actuado con dolo o negligencia grave», sostienen.
Sobre la creación de Vall Banc, los Cierco denuncian que se les haya «dejado de lado» y no se les integre en el capital social del banco puente, un hecho que tachan de «desconsideración y desprecio absoluto».
Tras presentar esta demanda, Higini y Ramón Cierco ultiman ahora la formalización de una reclamación de responsabilidad administrativa contra el Estado, con el convencimiento de que «ha habido un comportamiento culposo de la administración en todo el caso BPA».
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