Los saneamientos cuestan a la banca 49.900 millones

CaixaBank cerró 2012 con un 14,6% del mercado bancario español en cuanto a volumen de negocio –créditos más depósitos–, adelantándose así en dos años al objetivo que había previsto el plan 2010-2014. La integración de Banca Cívica y la compra de Banco de Valencia, que será efectiva este trimestre, han convertido a la entidad que preside Isidro Fainé en líder del sector en nuestro país. Con cerca de trece millones de clientes, CaixaBank cuenta con una cuota de mercado del 22,2%. Una de cada cinco nóminas o pensiones que se ingresan en la entidad, que da el 14,7% del crédito total y gestiona el 14,4% de los depósitos del sistema.

En el «probablemente peor año de la crisis», como lo calificó Isidro Fainé, CaixaBank obtuvo un beneficio neto de 230 millones, lastrado por la necesidad de dedicar 10.299 millones de euros a dotaciones y saneamientos (3.636 millones sólo para cumplir los requerimientos de los reales decretos de febrero y mayo. «Un gigantesco esfuerzo», como aseguró el consejero delegado, Juan María Nin.

CaixaBank no da por concluido el proceso de reestructuración financiera, pese a la reducción del número de entidades. «Nosotros ya hemos hecho lo que teníamos que hacer, ahora no tenemos nada sobre la mesa», aseguró Fainé al ser preguntado por el interés que pudieran suscitar en la entidad algunos de los bancos que están o estarán en proceso de subasta. El presidente está convencido de que el presente ejercicio será mejor. «Si se sigue por el camino de las reformas el inicio de la recuperación se producirá este mismo año».

Juan María Nin quiso destacar su desacuerdo con la teoría de que la banca ha cerrado el grifo del crédito. En 2012, CaixaBank ha realizado 800.772 operaciones por valor de 72.000 millones, lo que ha llevado el crédito total en balance por encima de los 223.000 millones. «Hemos crecido en crédito un 20,1% cuando el sector ha caído de media un 9,9%, al mismo tiempo que lo hemos hecho en recursos de clientes, que han aumentado en un 19,6% mientras la media del sector bajaba un 3,9%», subrayó.

Un año más, las empresas participadas han tenido un papel fundamental en la cuenta de resultado. Su aportación ha sido de 809 millones, un 22,8% más que en el ejercicio anterior, a pesar del cambio de política de dividendos de telefónica, que se ha traducido en 149 millones menos. Fainé aseguró que CaixaBank no tenía la más mínima intención de salir del capital de Repsol. CaixaBank ha cerrado 2012 con 6.342 oficinas y 32.625 empleados. Todo apunta a que en las actuales circunstancias estas cifras variarán en el transcurso del año. «No tiene sentido tener siete servicios centrales (tras la integración del grupo Banca Cívica y Banco de Valencia) ni oficinas duplicadas».

Empleo para jóvenes

La nueva ley de cajas sirvió de punto de partida a Fainé para reflexionar sobre la participación de La Caixa en CaixaBank. «Cuando tienes un banco grande no es necesario tener el 100% de su capital. Creo que los accionistas irán aumentando y cualquier día podemos tener una participación menor. Porque para tener el control no hace falta disponer del 51% de las acciones». En relación con los inmuebles adjudicados, la idea es darles salida en el curso de los próximos cuatro años.

Por otro lado, un total de 8 millones de ciudadanos se han beneficiado de una u otra forma de la obra social de La Caixa, que contó con 500 millones de presupuesto. Fainé aprovechó para anunciar que pondrá a disposición de los jóvenes seis millones de euros de la obra social para que puedan ser contratados en empresas o para arrancar como autónomos. El objetivo es que se puedan beneficiar de esta ayuda alrededor de 20.000 jóvenes.