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Muere Isidoro Álvarez

Muere Isidoro Álvarez, marca España

El presidente de El Corte Inglés, Isidoro Álvarez, falleció ayer en Madrid. El miércoles había sido ingresado en el hospital aquejado de una insuficiencia respiratoria

Isidoro Álvarez Álvarez, el pasado mes deagosto
Isidoro Álvarez Álvarez, el pasado mes deagostolarazon

Isidoro Álvarez ha dejado El Corte Inglés en la línea de salida de la recuperación. Con todos los problemas derivados de la crisis económica resueltos. Por vez primera en los últimos años, la cadena de grandes almacenes ha incrementado sus beneficios en un 6,2%. Su horizonte financiero está totalmente despejado hasta el año 2021 y el balance, sin exposición alguna al riesgo. Él es el artífice de la expansión nacional de la cadena y de los primeros pasos en el extranjero.

Nacido en Asturias en el año 1935, Isidoro Álvarez presidió El Corte Inglés desde el 2 de agosto de 1989, apenas unos días después del fallecimiento de Ramón Areces, su valedor y el hombre que tuteló su preparación para, llegado el día, tomar la riendas del grupo.

En 1953, con apenas dieciocho años, comenzó a trabajar en El Corte Inglés, simultaneando su trabajo con los estudios de Ciencias Económicas y Empresariales en la Universidad Complutense de Madrid. En 1957 se licenció con Premio Extraordinario.

Por entonces, El Corte Inglés había dejado de ser una pequeña sastrería situada en unos metros de la Puerta del Sol de Madrid para convertirse en un almacén, con más de 4.000 metros cuadrados de superficie de venta.

El discípulo de D. Ramón

Isidoro Álvarez aprendió de Ramón Areces todos los entresijos de la distribución comercial. «Mi escuela ha sido siempre El Corte Inglés y mi maestro Ramón Areces. Creo que la historia del comercio en España no puede entenderse sin la presencia de D. Ramón, que ha introducido técnicas y procedimientos que han permitido su modernización».

Como su mentor, Álvarez hizo de la discreción una herramienta más de trabajo. Quienes le han conocido más de cerca aseguran que acostumbraba a pasearse por los distintos departamentos de cada uno de los centros para comprobar el grado de atención de sus empleados tratando de pasar inadvertido, de ser un cliente más. Por encima de todo tenía que prevalecer la cultura de la marca. Almorzaba con relativa frecuencia en los comedores de la empresa. Quería que todo funcionara como una máquina perfecta.

El mismo año en que fue elegido presidente del grupo y nombrado Ejecutivo del Año por la revista «Mercado», Álvarez insistía en que «el único secreto de El Corte Inglés para llegar a la situación de liderazgo que hoy ostenta está en el trabajo en equipo, en la voluntad de superación de las personas que son, al fin y al cabo, el activo más importante de las empresas. Eso ha sido la filosofía de D. Ramón y yo la he compartido durante toda mi vida».

Crecer y crecer

A lo largo de sus veinticinco años de mandato, Isidoro Álvarez ha sido protagonista del crecimiento de la firma en el sector asegurador y de varias adquisiciones empresariales que han configurado el grupo en su forma actual.

En 1995, se hace con las propiedades inmobiliarias de Galerías Preciados, su único rival en el mercado doméstico. Álvarez aprovecha también las desinversiones obligatorias que el Gobierno impone a la fusión entre dos de las más grandes cadenas de distribución del mundo (Continente y Pryca) para, desde Hipercor, la segunda marca del grupo, hacerse con cinco hipermercados en otras tantas localidades españolas. Sus últimas operaciones de expansión están vinculadas a la compra de Mark & Spencer tras la decisión de arrojar la toalla y cesar sus operaciones en España ante la imposibilidad de competir con El Corte Inglés.

Aunque en el año 2001 abrió su primer establecimiento en el exterior (Lisboa), la expansión internacional sigue siendo la asignatura pendiente de la gran cadena. La crisis económica que ha sacudido la economía internacional desde el año 2007 impidió a Isidoro Álvarez hacer realidad un sueño de muchos años. Ahora, coincidiendo con la presentación de los últimos resultados económicos, Álvarez puso el reto sobre la mesa y se dio un «plazo de tiempo razonable» para llevar sus diferentes formatos de negocio a otros mercados.

Con un balance saneado, un horizonte financiero despejado y con la economía española creciendo a una velocidad de crucero que garantiza una mejoría de los datos de facturación y beneficios para los próximos años ha llegado la hora de proceder a la internacionalización de la enseña más importante de la distribución europea. Con su acostumbrada discreción, Álvarez no fijó ninguna fecha, porque las oportunidades se presentan.

Ante las accionistas

Una de las últimas operaciones realizadas por Isidoro Álvarez fue la firma de un acuerdo estratégico con Banco Santander, por el que la filial de consumo de la entidad financiera adquirió el 51% de Financiera El Corte Inglés. Para el banco supone consolidar su posición de liderazgo en Europa en el mercado de la financiación al consumo y aumentar la diversificación de su cartera en España y Portugal. Para los grandes almacenes, impulsar más campañas con el fin de incrementar su ventas en todos los centros.

Durante su intervención en la última junta de accionistas celebrada en agosto, Álvarez se mostró confiado en el futuro inmediato. «Tenemos capacidad para afrontar el futuro que, ejercicio a ejercicio, ha aumentado su patrimonio, ha conservado las cuotas de mercado y dispone de una alta fidelidad de sus clientes».

Una discreta vida privada

Trabajo y discreción han sido las dos palabras que han presidido la vida de Isidoro Álvarez. Sus apariciones públicas fuera de la junta general de accionistas y la inauguración de nuevos centros comerciales han sido escasísimas en estos años , lo que no ha sido obstáculo para el reconocimiento nacional e internacional de su labor. Estaba casado con María José Guil, madre de dos hijas, y sus aficiones eran el flamenco y la caza.