Banca

¿Es peligroso revelar mi número de cuenta a otra persona?

El número de cuenta, también conocido como código IBAN, es como el documento de identidad de una cuenta bancaria

Tarjetas de crédito
Tarjetas de créditoElise AmendolaAgencia AP

El número de cuenta, también conocido como código IBAN, es como el documento de identidad de una cuenta bancaria, ya que es un número único que se utiliza para identificarlas. La cuenta corriente tiene un código alfanumérico que consta de 24 dígitos compuesto por dos letras seguidas de números. Las primeras dos letras identifican el país, que en nuestro caso es España (ES), y van unidas a dos dígitos de control que sirven para validar la totalidad del IBAN. Los siguientes 20 dígitos sirven para identificar el código de la entidad, de la oficina, otros dígitos de control y, finalmente, el número de cuenta. Como podemos observar, este código contiene mucha información significativa, por ello, ¿es peligroso que este se comparta con terceros?

La solicitud del número de cuenta es algo habitual que puede ocurrir en el día a día de cualquier persona, ya que este suele compartirse a la hora de inscribirse en el gimnasio, para que la empresa nos ingrese la nómina o incluso para que un amigo nos haga una trasferencia.

A pesar de que proporcionar el código IBAN a un tercero puede haber generado cierta intranquilidad a algunas personas, desde el Banco de España (BdE) explican que pueden estar tranquilas, ya que disponer de este número "no le permitirá a nadie extraer dinero" de su entidad bancaria.

No obstante, en el caso de que un tercero tenga en su poder nuestro número de cuenta bancaria así como el del DNI, en algunas circunstancias se podrá llevar a cabo la domiciliación de recibos. Aunque esto pueda parecer un problema a priori, el BdE sostiene que la solución es "fácil y rápida", dado que se podrá devolver sin ningún problema el recibo correspondiente.

Si un tercero "malintencionado" dispone del número de nuestra tarjeta de crédito, en ocasiones podrán realizar movimientos que nos hagan ser víctimas de un fraude. Por tanto, para evitar que se de esta situación, el Banco de España aconseja a los clientes bancarios que se lleven a cabo los siguientes pasos:

  • No anotar ni llevar escrito el PIN en un papel.
  • Tomar medidas de confidencialidad en los cajeros, comprobando que nadie pueda observarnos a la hora de marcar el PIN de nuestra tarjeta.
  • Comprobar los extractos del banco para detectar movimientos sospechosos o pagos no autorizados.
  • No utilizar la tarjeta de crédito como identificación personal.
  • En el caso de que se utilice la tarjeta para comprar en internet, se deberá hacer uso de al menos tres medidas de autenticación reforzada para acreditar la identidad y reducir el riesgo de fraude.
  • No facilitar datos clave de la tarjeta para el pago de forma telemática (por teléfono, por internet, etc.), a menos que sean personas o en sitios web de total confianza.