De este modo, el rally del metal precioso acumula en lo que va de año una ganancia superior al 53%, impulsado por un avance del 34% desde que el pasado 14 de marzo la onza de oro rebasara por primera vez el umbral de los 3.000 dólares.
Inversiones
El precio del oro alcanza un récord histórico: supera los 4.000 dólares por onza por primera vez
La onza de este metal precioso podría a llegar a los 5.000 dólares en 2026, según los analistas
Récord tras récord. El precio del oro continúa en ascenso y ha vuelto a alcanzar un nuevo récord. Este miércoles este metal precioso ha superado por primera vez el umbral de los 4.000 dólares por onza debido a la preocupación de los inversores sobre el cierre de la Administración de Estados Unidos y los efectos que pueda tener en los tipos de interés, la turbulencia política en Francia o la tensión geopolítica.
En tiempos de incertidumbre el oro es considerado un activo refugio, por ello, este miércoles su precio llegaba a escalar hasta un máximo intradía de 4.037,02 dólares, según datos de CNBC consultados por Ep, lo que implica una revalorización del 1,3% respecto del cierre anterior.
"El oro ha experimentado un repunte histórico, duplicándose en menos de dos años, impulsado por las compras de los bancos centrales mientras se diversifica más allá del dólar estadounidense, la agresiva política comercial del presidente Donald Trump y los conflictos en Oriente Medio y Ucrania", explican desde ING Research.
Asimismo, Ewa Manthey, estratega de materias primas de la firma, señala que el cierre del Gobierno en Estados Unidos ha retrasado la publicación de datos clave sobre empleo, lo que añade más incertidumbre a un panorama económico ya frágil. En este contexto, la Reserva Federal enfrenta mayores dificultades para definir su política monetaria.
Pese a ello, los mercados anticipan que la Fed aplicará este mes un recorte de tipos de un cuarto de punto, una medida que podría favorecer aún más al oro, dado que el metal no genera intereses. A su vez, la inestabilidad política y las crecientes expectativas de una política monetaria más flexible continúan impulsando la demanda de activos refugio.
Mirando hacia adelante, Manthey destaca que los bancos centrales mantienen su apetito por el oro. El Banco Popular de China, por ejemplo, encadenó en septiembre su undécimo mes consecutivo de compras, incluso con los precios en máximos históricos. Paralelamente, la guerra comercial impulsada por Trump persiste, los riesgos geopolíticos siguen en aumento y las tenencias de ETF continúan creciendo, mientras el mercado refuerza sus apuestas por nuevos recortes de tipos de la Fed. "Todo esto sugiere que el oro aún tiene margen de crecimiento", concluye la analista. Concretamente, algunos expertos, como los de Goldman Sachs, apuntan a que la onza podría a llegar a los 5.000 dólares en 2026.