Hacienda

Receta fiscal del Gobierno: hay un 10% más de ricos y la clase media pierde renta

Los que ganan más de 600.000 euros apenas suponen el 0,06% del total de los declarantes. 8,32 millones de declarantes ingresó menos de 12.000 euros y, de ellos, 2,2 millones obtuvieron unas rentas de entre 6.000 y 12.000 euros

La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, ofrece una rueda de prensa en la sede del Ministerio, a 30 de marzo de 2023, en Madrid (España). La ministra ha presentado los datos de cierre de la ejecución presupuestaria del conjunto de las Administraciones Públicas del ejercicio 2022.
La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús MonteroMarta Fernández JaraEuropa Press

Más ricos, una clase media con menos recursos y una clase más desfavorecida que eleva su nivel, pero que apenas le sirve para posicionarse un escalón más elevado del estrato más bajo. Esta es la principal conclusión de la última estadística de declarantes del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) -correspondiente al ejercicio 2021- publicada por la Agencia Tributaria, que determina que el número de españoles que declararon rendimientos del trabajo superiores a los 601.000 euros anuales se elevó a un total de 12.178, lo que supone un incremento cercano al 10% respecto a 2020, pero cuyo total apenas supone el 0,06% del total de los declarantes, y un 15% más si nos remontamos al año 2007, ejercicio previo a la Gran Crisis Financiera, cuando había 10.580 declarantes con estas rentas máximas.

En el lado contrario, la estadística muestra un avance de contribuyentes de los cuatro tramos más bajos hacia los inmediatamente superiores. Los que concentran los contribuyentes con rentas laborales de hasta 12.000 euros, supusieron un 37,77% del total, un 3% menos que hace un año, mientras que los tramos con rendimientos a partir de 12.000 euros aumentan tanto en número de contribuyentes y porcentaje sobre el total. Según estos datos, resulta especialmente significativo que 8,32 millones de declarantes ingresó menos de 12.000 euros y, de ellos, 2,2 millones obtuvieron unas rentas de entre 6.000 y 12.000 euros, el 10% del total. Esto significa que la mayor de estos declarantes no habrían ingresado ni tan siquiera el salario mínimo interprofesional (SMI), ya sea por no tener la jornada completa, ser fijos discontinuos, tener contratos temporales o recibir alguna ayuda, como el ingreso mínimo vital (IMV).

A partir de ahí, la mayor parte de los contribuyentes (4,5 millones, el 20,5% del total) declaró unos rendimientos de entre 12.000 y 21.000 euros y otros 4,4 millones, entre 30.000 y 60.000 euros (20,04% del total). Además, 3,7 millones (el 16,96%) declaró rendimientos entre 21.000 y 30.000 euros, mientras que otros 3,3 millones (el 14,84%) declararon entre 1.500 y 6.000 euros anuales en rentas del trabajo.

Así, mientras aumentaron las rentas medias entre quienes ingresaron hasta 1.500 euros un 2,26%, entre 1.500 y 6.000 euros un 1,83%, entre 6.000 y 12.000 euros un 1,77% y entre 12.000 y 21.000 euros un 0,41%, la clase media, la que se encuadra mayoritariamente entre 21.000 y 30.000 euros de renta, perdió el 0,46%, y entre 30.000 y 60.000 euros, un 0,16%, En el caso de entre 60.000 y 150.000 euros lo hizo un 2,33%, y entre 150.000 y 601.000 euros, un 7,69%. En la parte más alta de la tabla, los contribuyentes que declararon más de 601.000 euros perdieron un 3,7% de su renta. El grueso de los contribuyentes se enmarca en las rentas del trabajo de entre 12.000 y 60.000 euros, que suponen el 57,5 % del total.

En términos generales, los contribuyentes que declararon entre 60.000 y 150.000 euros fueron un total de 906.910 personas (el 4,11% del total), y los que tuvieron rendimientos entre los 150.000 y los 600.000 fueron 123.314 (el 0,56% del total). De esta forma, y sumando también a los que declaran más de 600.000 euros, el conjunto de contribuyentes con rentas superiores a los 60.000 euros superó en 2021 el millón, tras incrementarse un 14% más respecto al año 2020. En el lado contrario, 1,4 millones de liquidaciones de IRPF (el 6,46% del total) se situaron en el tramo más bajo, entre 0 y 1.500 euros para todo el año, mientras que un total de 1,4 millones de declaraciones, el 6,45% del total, registró un resultado de la declaración negativo o cero, donde se incluyen los perceptores del IMV.