Pensiones

¿Sabías que puedes aumentar tu pensión por incapacidad hasta un 50%?

La cuantía anual de la pensión no contributiva de incapacidad se fija en 7.905,80 euros

Persona en silla de ruedas
Persona en silla de ruedasDreamstime

La pensión no contributiva de incapacidad "asegura a toda la ciudadanía en situación de incapacidad y en estado de necesidad una prestación económica, asistencia médico-farmacéutica gratuita y servicios sociales complementarios". Así lo define el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso).

Lo esencial para optar a ella es que la discapacidad esté reconocida en al menos un 65%. Además de este requisito, es necesario cumplir con los siguientes criterios:

  • Edad: para la pensión de invalidez será necesario tener entre 18 y 65 años.
  • Tener residencia legal en España: es imprescindible residir en territorio español y haberlo hecho durante un período de cinco años, de los cuales dos han de ser consecutivos e inmediatamente anteriores a la fecha de la solicitud.
  • Carecer de ingresos suficientes: no se deben superar los límites de ingresos establecidos. Estos variarán en función de la situación familiar y de convivencia. Si una persona vive sola, sus ingresos anuales deben ser inferiores a 7.905,80 euros. En cambio, este límite aumentará según el número de convivientes: si son dos, será de 13.439,86 euros; si son tres, 18.973,92 euros; y si son cuatro, este ascenderá a 24.507,98 euros. Además, estos se incrementarán si alguno de los convivientes es padre o hijo del solicitante. En este caso, los límites son de 33.599,65 euros (2 convivientes), 47.430,80 euros (3) y 61.269,95 euros (4).

Para el año 2025, la cuantía anual de la pensión no contributiva de incapacidad se fija en 7.905,80 euros, lo que equivale a 564,70 euros al mes en 14 pagas. No obstante, esta cuantía puede aumentar en un 50%.

Si el beneficiario de una pensión de invalidez no contributiva tiene una discapacidad igual o superior al 75% y necesita la asistencia de otra persona para realizar las actividades básicas de la vida diaria, se le concede un complemento económico, elevando la cuantía anual a 11.858,70 euros (847,05 euros mensuales).

Es importante señalar que este complemento no se concede automáticamente; hay que demostrar la discapacidad mínima del 75% y presentar la documentación que acredite la dependencia de otra persona para la realización de los actos esenciales. Además, hay que asegurarse de que se siguen cumpliendo los demás requisitos de la pensión no contributiva: residencia legal en España, límite de ingresos, y edad entre 18 y 65 años.

Este mecanismo representa una ayuda muy significativa para quienes tienen necesidades adicionales debido al grado de su discapacidad, y puede marcar una diferencia notable en el nivel de vida. Aquel que piense que puede cumplir con todos estos requisitos, debe consultar con los servicios sociales del Imserso o con un asesor especializado para tramitar la solicitud y reunir la documentación necesaria.