El sector turístico augura una Semana Santa de récord

Después de dejar atrás los nubarrones de la pandemia, hay ganas de viajar; tantas, que no importa que la previsión del tiempo ande revuelta o que los precios estén disparados. Esta Semana Santa promete y el sector turístico coincide en augurar que se superarán las cifras de abril de 2019, antes de que el coronavirus lo trastocara todo y cuando se rozó una ocupación media del 80% en toda España, siendo uno de los mejores datos registrados hasta ese momento. «Las perspectivas que tenemos ahora son muy positivas y todo apunta a que estamos ante el arranque de una temporada alta en la que volveremos a hablar de récord turístico, tanto en reservas como en el gasto realizado por los viajeros nacionales e internacionales», avanza Carlos Abella, secretario general de la Mesa del Turismo.

No se trata de una simple percepción. Los datos que manejan los profesionales de la industria «de la felicidad» no dejan lugar a dudas: «Iberia, por ejemplo, está ofreciendo un 6% más de capacidad aérea, es decir, con más asientos, que en estas fechas de 2019, y el resto de aerolíneas también presentan esa línea ascendente», detalla Abella. En el sector hotelero, por su parte, «tenemos unas reservas que ya están en el 80% en zonas de costa, tanto en la península como en los archipiélagos, aunque incluso en algunas áreas concretas ya se encuentran por encima del 90%, mientras que en los destinos de interior vemos unas previsiones de reservas por encima del 65%», asegura Jorge Marichal, presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos, Cehat.

[[H3:Vuelta a la «normalidad»]]

Estas halagüeñas expectativas también se manejan desde el sector de las agencias de viajes. «La campaña de Semana Santa va muy bien y podemos destacar la peculiaridad de que las reservas se han anticipado mucho con respecto al año pasado, en el que se reservó más a última hora. Todo ello hace que las previsiones sean muy buenas», apunta Mercedes Tejero, gerente de la Confederación Española de Agencias de Viajes, CEAV. Y así lo ratifican desde la Asociación Corporativa de Agencias de Viajes Especializadas, Acave, cuyo presidente, Jordi Martí, reconoce que «el calendario juega a nuestro favor y esto ha propiciado más ganas de viajar. Además, no hay que olvidar que el año pasado por estas fechas todavía teníamos a Ómicrom como actor secundario y esta Semana Santa será la primera de auténtica ‘‘normalidad’’ tras la pandemia. Por ello, a pesar de las circunstancias económicas, los viajes se van a incrementar dentro y fuera de España. De hecho, el 24% de las agencias registrará un aumento de sus reservas por encima del 15% en comparación con 2022. Todos nuestros socios coinciden en constatar que se han recuperado los niveles de actividad precovid y con el entorno macroeconómico que tenemos superaremos seguro los datos del año 2019».

Y la realidad puede superar, incluso, las expectativas, «a pesar de que este año, por culpa de la inflación y el elevado incremento de los costes, los españoles han sido más previsores y no se han arriesgado a esperar las ofertas de última hora. Estamos comprobando que ahora las ganas de viajar superan con creces al tema económico, aunque ya se empieza a percibir que el cliente baraja más opciones y el precio empieza a ser determinante», confiesa Abella.

Sin embargo, la volatilidad meteorológica propia de estas fechas hace que la Semana Santa sea un periodo en el que, tradicionalmente, la última hora puede declinar la balanza del éxito en algunas zonas, sobre todo del norte de nuestro país.

Turismo rural de última hora

Consciente de ello, el presidente de los hoteleros se atreve a asegurar que «los resultados finales de este periodo van a mejorar seguro las previsiones estimadas gracias a las reservas de última hora, por lo que podemos hablar de una ocupación por encima del 90 o el 95% en destinos de sol y playa, hasta el punto de que podrían llegar a rozar el lleno en campings». Por su parte, gracias a los indecisos que elijan su destino en estos últimos días, «en las zonas de interior de la península la ocupación estará, probablemente, por encima del 80%», vaticina Marichal.

Buena prueba de ello es que las reservas en los alojamientos rurales siguen creciendo día tras día, tal y como ponen de manifiesto los datos de EscapadaRural, plataforma digital especializada en turismo rural, donde Navarra, Extremadura, Aragón, Asturias y Castilla y León lideran la ocupación para las noches del seis al nueve de abril.

A diferencia de la pasada Semana Santa, el hecho de que la pandemia ya no forme parte de nuestro vocabulario hace que el abanico de posibilidades a la hora de elegir destino se multiplique y los españoles vuelvan a animarse a cruzar la frontera en este primer gran éxodo vacacional del año. «Para estas fechas podemos destacar destinos europeos como Roma, París, Londres y Lisboa», confirman desde Viajes El Corte Inglés, una tendencia que también afianza la portavoz de CEAV, quien detalla que, en media distancia, destacan las capitales europeas, Marruecos, Túnez, Turquía, Egipto, Jordania, Chipre, Malta… Y Caribe y EE UU en larga distancia. Además, este año, a diferencia del pasado, se está vendiendo muy bien Asia, así que podemos hablar de China y Japón como repunte especial».

Regreso masivo de extranjeros

En lo que va de año, el volumen de turistas internacionales supera por primera vez los niveles de 2019, gracias a la recuperación de los principales mercados. De hecho, la intención de viajar a España se ha incrementado, especialmente entre los estadounidenses, por lo que España se consolida así con niveles de intención de viaje muy por encima de antes de la pandemia, según el informe Smart Observatory en su edición de primavera realizado por PwC para Cehat. «Hay un dato muy esperanzador y es que solo en abril el 60% de las reservas hoteleras ya son de viajeros internacionales, lo que nos hace vislumbrar un verano muy exitoso», presagia Abella.

Las piedras del camino

►La industria turística al unísono está de acuerdo en que todo apunta a que este 2023 España puede vivir uno de los mejores ejercicios de la historia. «Las buenas previsiones de la Semana Santa son el pistoletazo de salida a una temporada alta que, desde luego, pinta muy bien», reconoce el secretario general de la Mesa del Turismo, Carlos Abella. Sin embargo, pueden aparecer algunos escollos que nublen los resultados. «Las huelgas de transportes que estamos viendo en Alemania podrían tener un pequeño impacto en algunos destinos muy dependientes del mercado alemán, ya que implican cancelaciones», advierte Abella, quien también alude a la repercusión de la inflación, «que podría pasar factura más a largo plazo, pues por ahora no se está notando y resultan más fuertes las ganas de viajar que el encarecimiento de los gastos».