S&P mantiene el rating de CaixaBank tras la adquisición de Banco de Valencia

S&P considera que los términos de la compra, que incluyen una inyección de capital de 4.500 millones y un "esquema de protección de activos", por el cual el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) soportará durante un plazo de 10 años el 72,5 por ciento de las pérdidas de la entidad valenciana, reducen los riesgos de la operación.

"La adquisición tendrá un impacto limitado en el perfil financiero de CaixaBank", señala S&P, que destaca además que Banco de Valencia es una entidad pequeña, en comparación con el volumen de activos del grupo que preside Isidre Fainé.

Banco de Valencia dispone de unos activos de 20.704 millones de euros, mientras que los de CaixaBank superan los 343.000 millones.

La agencia explica que las condiciones de la adjudicación mitigan el riesgo de posibles pérdidas y contribuyen a proteger la solvencia y la calidad de los activos de CaixaBank.

Standard & Poor's, no obstante, ha decidido mantener el rating de CaixaBank en perspectiva negativa como reflejo de las dificultades económicas de España.