Seguridad

Chips cuánticos para la seguridad y la privacidad, propuesta de Quside

La startup, nacida como una spin off del Instituto de Ciencias Fotónicas de Barcelona, quiere ampliar el alcance de sus soluciones

Chips cuánticos de Quside
Chips cuánticos de QusideQuside

No todas las startups son de software. Quside, una spin off del Instituto de Ciencias Fotónicas de Barcelona, se dedica al diseño de chips cuánticos con los que las empresas pueden tener soluciones de aleatoriedad avanzadas, claves para los mercados de la ciberseguridad y la computación de alto rendimiento.

El proyecto nace en 2008 como parte de una idea de la Agencia Espacial Europea para el desarrollo de comunicaciones cuánticas. A través de ese proyecto se desarrolló una tecnología para la generación de números aleatorios. Una línea de trabajo que se empezó a desarrollar de forma más amplia a partir del 2012, año en el que Carlos Abellán se une como uno de los cofundadores de la empresa.

Después de 5 años de trabajo de investigación académico “muy intenso”, y tras “demostrar que podíamos integrar todo en un solo chip semiconductor” es cuando se deciden a montar la empresa, nos explica.

De los 5 miembros del equipo fundador, solo 3 lo estaban a tiempo completo. Para lanzar Quside como empresa contaron con financiación privada con una ronda de semilla de un inversor estratégico. “Empezamos a desarrollar la tecnología con un primer objetivo: demostrar que podemos industrializar la producción de nuestros chips”, detalla Abellán. “Estaba muy bien lo que habíamos hecho a nivel académico (demostrar que podíamos hacer un chip), pero era un proceso muy “manual” y había que industrializarlo”, reconoce.

En esta segunda etapa, que arranca hace ahora un año aproximadamente, el reto es la comercialización de estos chips cuánticos, siendo los mercados de la criptografía y de la alta computación los principales sectores de destino.

Como diseñador de estos chips (la fabricación se externaliza a otras compañías), Quside va a tener una “participación activa” en el PERTE Chip del Gobierno, “tanto en diseño de chips fotónicos como el diseño de chips electrónicos y en la interfaz entre la fotónica y la electrónica”, detalla Abellán.

Seguridad aleatoria

La seguridad es uno de los mercados más clave para el uso de los procesadores cuánticos que propone Quside. Gran parte de las aplicaciones utilizan la criptografía para encriptar y asegurar las comunicaciones. “La criptografía, a su vez, depende fundamentalmente de tener acceso a imprevisibilidad; es decir, si no tenemos aleatoriedad no tenemos seguridad”, asegura este experto, quien añade que todo esto es un reto. “Generar números aleatorios en criptografía es fundamental y todo software criptográfico utiliza esta tecnología”, defiende.

Preguntado por una aplicación práctica de estos supuestos, Abellán usa el símil de las cerraduras de las llaves.

“Cuando sales de tu casa, cierras con la llave y eso te da seguridad. No tendría ningún sentido si dejáramos la llave colgando al lado de la cerradura, porque cualquiera podría ir y entrar. Con los números aleatorios en la criptografía es lo mismo: no tener buenos números aleatorios es lo mismo que tener tus contraseñas apuntadas en cualquier sitio: cualquiera puede verlas”, detalla. Por eso, asegura que la generación de números aleatorios de forma segura y confiable es “fundamental para la seguridad y la privacidad”.

El reto sería que los usuarios vieran el símbolo de su empresa en los productos en los que esta tecnología está desplegada e integrada para que aumentara la confianza en ellos. Sin embargo, añade que “no es solo la oportunidad que puede representar tener comunicaciones más seguras, sino que va a ser una necesidad regulatoria”, especialmente en sectores como sanidad, finanzas o defensa.

“Todas las empresas a nivel nacional e internacional deberían saber qué es lo que está pasando, pues puede que tengan que empezar ahora a trabajar en este terreno”, explica, añadiendo que desde Quside intentan hacer mucha concienciación. “Esperamos que tenga un impacto positivo, no solo de forma directa en nuestra empresa, sino de concienciación”, asegura.

Equiopo Quside
Equiopo QusideQuside

Tecnología cuántica

Carlos Abellán explica que, aunque su empresa se dedica a los chips cuánticos, estos no son los que se utilizan para los ordenadores cuánticos.

“Hay varios tipos de tecnología cuántica”, detalla. “La que tiene más atención mediática es la computación cuántica, donde están todos retos como enfriar a temperatura criogénica. Este tipo de tecnologías para hacer computación cuántica se basa en poder hacer “cálculos arbitrarios”. En nuestro caso, tenemos un chip que utiliza procesos cuánticos que solo solo y únicamente sirve para una cosa: generar cosas impredecibles y aleatorias que es uno de los procesos más fundamentales de la cuántica”, relata.

Emprender en hardware

Abellán reconoce también que emprender en hardware y no en software les convierte en una “rara avis” del sector de las startups, donde los tiempos son más largos. “En software, con un prototipo, ya puedes empezar a vender. El diseño de un chip lleva años”, pone como ejemplo. Pero asegura que hay inversores especializados en estas materias “que son increíbles y que entienden las dinámicas que te ayudan a crecer”.

Aunque hace poco más de un año recibieron una ronda seed tipo A, Abellán prefiere no dar detalles de la cifra, puesto que están a punto de cerrar la entrada de nuevos inversores.

Preguntado sobre planes de futuro y si estos contemplan una posible venta, Abellán asegura que la visión de la empresa es conseguir que el impacto de una tecnología hecha desde España sea global. “¿Cuál es la mejor manera de conseguir esto: si a través de una fusión, de una compra o de crecer de forma orgánica? Lo tendremos que ver a medida que vayamos avanzando”, asegura.

De momento, reconoce que “estamos hablamos con grandes empresas” pero añade que “nuestra apuesta es crecer nuestros componentes, crecer la propiedad intelectual de la compañía y seguir creciendo desde aquí”.