Nash21 convierte el contrato de alquiler en NFT para tener más negocio con blockchain

Convertir un contrato de alquiler en un activo que genera más ingresos. Esa es, básicamente, la propuesta de Nash21, una startup que apuesta por la tecnología blockchain y los bien intangibles tipo NFT para hacer realidad esta idea.

Unas herramientas que, además, permitirán a un tercero (ni el propietario ni el inquilino) obtener unos rendimientos adicionales.

Por una parte, al convertir estos contratos en un producto de Nash21, el arrendador puede ir cobrando por adelantado el pago de su alquiler, tanto en cantidades diarias como en mensualidades completas (hasta 12 meses de adelanto).

Según nos explica Gaby Roberto Baró, cofundadora y portavoz de la startup, estas rentas están garantizadas a través de una empresa externa, Finaer. “A nosotros nos gusta decir que es una renta fluida”, detalla, “porque rompemos con el esquema de que se reciba el dinero una vez al mes. Con Nash21 la persona tiene disponibilidad de la renta cuando quiera, en el momento que quiera, y eso es lo que nos permite la tecnología”. Se trata de un fondo de garantías descentralizado.

Cabe señalar que quien recibe ese adelanto es el propietario del inmueble o la persona que tenga la cesión de derechos de cobro de ese contrato.

Entrada de un tercero

Es aquí cuando entra en juego un inversor que puede estar interesado en cobrar los derechos de cobro de este contrato. “Este inversor puede comprar tu contrato, tú obtener ese adelanto y el inversor cobrar esta renta garantizada”, detalla.

Cuando un propietario decide recibir un adelanto de su contrato, en realidad no percibe toda la cantidad, puesto que se le aplica un interés que hay que descontar. En estos momentos, esta tasa de descuento está en el 5%. Según Gaby Roberto, es una tasa menor que la que aplican los bancos en concepto de factoring, por lo que sigue siendo competitiva.

Al convertir los contratos de alquiler en un NFT, cualquier inversor puede comprar los derechos de cobros. Y será el que reciba los pagos que haga el inquilino (quien no tiene que adelantar el pago de hasta 12 mensualidades), menos esa tasa de interés que se aplica por el adelanto recibido por el propietario.

Cabe señalar que, pese a toda esta tecnología, los inquilinos y propietarios pueden cobrar y pagar las rentas en una cuenta de banco tradicional o, si lo prefieren en alguna moneda virtual o cripto. De momento esta opción es minoritaria, según reconoce Nsh21, que asegura que tiene 600 contratos ya por valor de 7,5 millones de euros.

Gaby Roberto Baró reconoce que no es fácil explicar cómo funcionan su propuesta, pero asegura que “explicándole a un propietario que tiene el contrato garantizado, la exposición de la renta cuando quiera, que ya no tiene que esperar al primer día de cobro de cada mes, y la posibilidad, en cualquier momento, disponer del adelanto del contrato con su renta garantizada”, el concepto se acaba entendiendo.

“Lo más importante es la posibilidad que tiene el propietario de adelantar las rentas, de tenerlas disponibles garantizadas”, asegura.

Por eso, sus planes son crecer en nuestro país, tanto en clientes como en personal. “Ojalá convertirnos en el próximo unicornio de España”, aspira.