UGT y CC OO piden tapar el agujero de las pensiones «vía impuestos»

El Gobierno y los sindicatos acuerdan tratar cualquier reforma de la Seguridad Social en el marco del Pacto de Toledo

Las cuentas de la abuela no fallan. Al menos no en lo que respecta a la Seguridad Social. Los ingresos, suma de las cotizaciones de los trabajadores y de los rendimientos menguantes del cada vez más escuálido Fondo de Reserva, en mínimos tras la crisis, no dan para hacer frente al incremento del gasto, especialmente con las elevadas pensiones medias de los nuevos jubilados, que rondan los 1.400 euros mensuales.

En eso y en poco más coincidieron ayer todos los actores que conforman la Comisión de Seguimiento del Fondo de Reserva, reunida de urgencia a petición de los sindicatos tras un año sin hacerlo. Como trasfondo, la disposición de 8.700 millones de euros realizada por el Gobierno, la más elevada en una sola retirada, para pagar las pensiones de julio, lo que ha dejado la hucha de las pensiones en 25.176 millones cuando en 2011 había 66.815 millones, su máximo hasta la fecha.

Los sindicatos UGT y CC OO resaltaron la «impecable» gestión financiera del Fondo de Reserva, pero afearon al Gobierno que ocultara a los agentes sociales su intención de retirar 8.700 millones. También reclamaron que cualquier decisión que se tome sobre la hucha de las pensiones pase primero por el Pacto de Toledo y que el Ministerio de Empleo y Seguridad Social los informe de las previsiones de desfase entre ingresos y gastos del próximo trimestre.

«Hemos denunciado que no se pueden financiar las bonificaciones a la contratación a cuenta de la Seguridad Social porque aumenta el agujero. Tampoco resuelve el problema que las pensiones no contributivas se paguen con impuestos. Alivia el problema, pero no lo soluciona», indicó a este diario la secretaria de Políticas Sociales, Empleo y Seguridad Social de UGT, Mari Carmen Barrera, al término de la reunión.

Solución profunda

Los agentes sociales reclaman una solución más profunda que termine, para empezar, con el agujero de la Seguridad Social. Para ello, según indicaron fuentes presentes en la reunión a LA RAZÓN, los sindicatos propusieron una financiación extraordinaria «vía impuestos» para equilibrar el déficit del sistema.

La reunión estuvo presidida por el secretario de Estado de Seguridad Social, Tomás Burgos, arropado por el director general de Tesorería, Francisco Gómez. Por el resto de agentes sociales acudieron el secretario de Protección Social de CC OO, Carlos Bravo, y el director de Relaciones Laborales de la patronal CEOE, Jordi García Viñas.

Las partes acordaron tratar cualquier reforma de la Seguridad Social en el marco del Pacto de Toledo, que lleva casi un año sin convocarse como consecuencia del periodo electoral vivido. La convocatoria de este foro parece imperiosa dado que el déficit de la Seguridad Social alcanzará el 1,1% del PIB, según las últimas previsiones del Gobierno.

La longevidad alcanzada en España, una de las más elevadas del planeta, se ha convertido en un quebradero de cabeza para el mantenimiento del futuro sistema de pensiones y más habida cuenta de que los españoles «ganan» un año de vida extra cada lustro.

Pese al fuerte incremento del empleo del último año y medio el sistema arrastra un fuerte déficit que se agudizará si no se acelera aún más el crecimiento o se cambia el diseño de la Seguridad Social. En este sentido, el BBVA Research estima que para sostener las pensiones del futuro habrá que alcanzar los 27 millones de cotizantes en 2027, unos 9,3 millones más que en la actualidad.

El problema se agudiza porque los jubilados que comienzan a cobrar desde hoy su pensión disponen de pensiones más elevadas. Así, el importe medio de la pensión de jubilación para aquellos pensionistas sujetos al régimen general que comenzaron a cobrar en marzo pasado fue de 1.397,50 euros, más que el salario medio más frecuente en España, que ronda los 1.100 euros.