Laboral

Yolanda Díaz activa el plan B: aprobará el nuevo registro horario por decreto para reducir la jornada en la sombra

Abrirá la consulta pública, después se elevará al Consejo de Estado y por último será aprobado en Consejo de Ministros. Endurecerá el registro horario para tener control total de la jornada y las horas extras

Yolanda Díaz en el Congreso de los Diputados
Yolanda Díaz en el Congreso de los Diputados. David JarDavid JarFotógrafos

La primera derrota parlamentaria del Gobierno en el inicio del nuevo curso político ha impactado en la línea de flotación de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que suma la derrota más dura de la legislatura en una de sus medidas estrella. Pero tras este revés, el equipo de su secretario de Estado, Joaquín Pérez Rey, prepara ya un plan de emergencia para volver a presentar el proyecto sin apenas cambios y aprobarlo vía decreto a través del Consejo de Ministros, al que pretenden llevarlo de forma inmediata con un nuevo registro horario que, junto al derecho a la desconexión digital, también formaba parte de este proyecto de ley y también han decaído.

De este modo, el Ministerio de Trabajo tiene previsto iniciar hoy mismo la apertura de una consulta pública sobre esta polémica ley, que pretende aprobar ahora por fases, iniciando el proceso con la aprobación de la citada reforma del registro horario, una modificación que estaba incluida en el proyecto de ley de reducción de la jornada que ha sido vetado en el Congreso con los votos de PP, Vox, Junts y UPN. Tras la votación, que ha devuelto el proyecto de ley al Gobierno, fuentes del Ministerio de Trabajo han explicado que primero se abrirá la consulta pública, después se elevará al Consejo de Estado y por último será aprobado en Consejo de Ministros.

La intención del Ministerio es hacer la reforma del registro por la vía reglamentaria a través de un decreto que no requiera la convalidación del Congreso ni tramitación parlamentaria alguna, ya que este registro tendrá rango reglamentario, de manera que no tendrá que someterse a votación en el Congreso y podrá sortear el rechazo de Junts. De este modo, Trabajo pondrá en marcha un endurecimiento del control horario, que pasará a ser exclusivamente digital y con mecanismos de identificación del trabajador. El objetivo es permitir a la Inspección de Trabajo un control total vía telemática de los registros horarios de las empresas para evitar el fraude en las horas extraordinarias y forzar a las empresas a reducir sus jornadas.

Lo que no podrá renovar Díaz es el régimen sancionador a las empresas si no cumplen con la nueva normativa. La nueva fórmula tendrá que dejar fuera el endurecimiento de sanciones que contemplaba el proyecto de ley que decayó hace unas horas en el Congreso, ya que para activar esos cambios, que es una modificación legislativa, sí están obligados a pasar por el Congreso.

La ministra de Trabajo cumple así sus amenazas hechas al saber que Junts tumbaría su medida estrella y activará los cambios de la ley del registro laboral que aprobó en 2019 y que obliga a toda empresa a recopilar cuántas horas hacen cada día sus empleados. Ahora, empresas y autónomos de cualquier tamaño y condición están obligados a trasladar la información horaria en formato digital y de forma inmediata, algo que microempresas y trabajadores por cuenta propia han advertido que en muchos casos puede ser inviable. La intención de Díaz es controlar en remoto y en tiempo real las jornadas de todos los trabajadores para evitar que se produzcan excesos de jornada y, por tanto, reducirla en la sombra.