Alberto Núñez Feijóo

Manual para hacer frente a la izquierda

No busque el futuro elector de Feijóo fórmulas mágicas que despejen de un plumazo los nubarrones que obscurecen el presente y el futuro, pero confíe en que las medidas que propone serán eficaces, a fuer de probadas

La entrevista que hoy publica LA RAZÓN con el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, es, figuradamente, claro, un manual para hacer frente a la actual izquierda gobernante, tanto en el plano político como económico, y no sólo porque radiografía los principales problemas que afectan a la sociedad española, sino porque el líder popular se aleja del discurso populista en boga, impulsado por la crisis hasta niveles que denotan ansiedad, para plantear unas líneas de acción de gobierno que cualquier ciudadano puede entender, al menos, como razonables.

No busque, pues, el futuro elector de Feijóo fórmulas mágicas que despejen de un plumazo los nubarrones que obscurecen el presente y el futuro, pero confíe en que las medidas que propone el candidato de centro derecha serán eficaces, a fuer de probadas. Son planteamientos sencillos, sin innecesarios adornos con la neolengua política, que podemos resumir en dos frases: «hay que devolver a los ciudadanos y a las empresas el dinero extra recaudado con los impuestos por la inflación» y «cualquier estrategia energética debe velar por el mantenimiento del tejido industrial».

A este respecto, Núñez Feijóo hace una puntualización que revela la nula inclinación del actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a llegar a algún tipo de acuerdo con el principal partido de la oposición, y explica que cuando en abril remitió a La Moncloa un documento con las recomendaciones de expertos económicos y en política de energía, éste no llevaba las siglas de su partido, sino solo el escudo de España y que la respuesta fue un silencio cargado de soberbia. Y dice más. Que al tratar de la renovación del CGPJ, en la primera reunión, Sánchez le advirtió que no iba a aceptar que los jueces elijan a los jueces, reduciendo la negociación a un simple y descarnado intercambio de nombres.

En definitiva, Núñez Feijóo trasmite a lo largo de toda la entrevista la percepción de que no ha hallado puente alguno con el Ejecutivo, por más que lo haya intentado. Confirma lo ya sabido y, en cierto modo, explica intervenciones como la de Pedro Sánchez, ayer, en Sevilla, que despachó con un discurso muy radical, asumiendo el argumentario de la conspiración de sus socios de Unidas Podemos, y muy alejado de la moderación de un partido de corte socialdemócrata como se supone que era el PSOE. Todo indica que en los próximos meses, más a medida que se aproximen las citas electorales, se extremará la confrontación política desde las distintas instancias gubernamentales. Pero hallarán a un líder de la oposición y firme candidato a La Moncloa con un discurso de gobierno centrado en la resolución de los problemas más inmediatos, con unas claras líneas políticas y capaz de aunar a su partido, desde la autonomía de las ejecutivas regionales, detrás del proyecto.