Editorial

El submarino: El patinazo de Paredes

La «rajada» de Marisa Paredes, a la que le pudo su papel como musa decadente de Sumar, contra la presencia de la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso en la capilla ardiente de Concha Velasco, se cayó por sí misma

Marisa Paredes en la capilla ardiente de Concha Velasco
Marisa Paredes en la capilla ardiente de Concha Velasco Agencia EFE

La «rajada» de Marisa Paredes, a la que le pudo su papel como musa decadente de Sumar, contra la presencia de la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso en la capilla ardiente de Concha Velasco, se cayó por sí misma. Y es que algunos de los allegados de la actriz fueron los primeros en considerar que Paredes se pasó de lista por criticar el papel institucional de Ayuso, que, por otra parte, fue presentada en su momento a Velasco por uno de sus hijos.