«El medallón perdido»: Quiero esa joya

Durante su visita a un orfanato al que acaban de llegar nuevos niños, Daniel Anderson les narra un cuento.

Durante su visita a un orfanato al que acaban de llegar nuevos niños, Daniel Anderson les narra un cuento sobre la historia de dos jóvenes que encuentran un medallón perdido siglos atrás y que, gracias a sus mágicos poderes, los transporta a esa época, cuando el pérfido y pintoresco guerrero Cobra desea gobernar tiránicamente la isla donde están. Allí, junto al auténtico, e insoportable en un principio, heredero al trono y otro chico del poblado, intentarán que el malvado tipo no se salga con la suya. El debut de Bill Muir rezuma buenas intenciones pedagógicas y las firmes convicciones religiosas del director (algo muy inusual en estos descreídos tiempos), aunque las deficiencias técnicas y los modestos efectos visuales del filme (que incluso a veces evocan aquella deliciosa serie B de los 50 con monstruos infatigables) lastren un tanto el producto final. Con tendencia, por cierto, hacia el sentimentalismo, por ejemplo, durante la muerte de un anciano sabio que recuerda ligeramente al maestro de Kung Fu.