Estreno

«El poder del dinero»: Traición insustancial

Director: Robert Luketic. Guión: Barry Levy a partir de la novela de Joseph Finder. Intérpretes: Liam Hemsworth, Amber Heard, Harrison Ford, Gary Oldman y Embeth Davidtz. EE UU, 2013. Duración: 106 minutos. Thriller.

«El poder del dinero»: Traición insustancial
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Vayamos por partes: el título original en inglés de la película que nos ocupa es «Paranoia», pero, por una vez al menos, no sólo resulta extraño o pintoresco el que los distribuidores le endosaron para estas tierras. Porque en la cinta dirigida por Robert Luketic (ya le queda un poco lejos, la rodó en 2001, la divertida «Una rubia muy legal») hay tipos estereotipadamente ambiciosos, pero de locos no tienen ni un pelo. Tan poquitos como Jock Goddard (un nuevamente cariacontecido Harrison Ford), pero vayamos por partes: el atractivo Adam Cassidy (Liam Hemsworth, «Los juegos del hambre»), que odia su trabajo en la empresa tecnológica Wyatt Corporation, decide cometer un delito para ayudar a un amigo, por lo que es acusado de un delito federal. Cuando su irritable jefe (Gary Oldman) descubre el pastel le propone un trato y evitar así la cárcel: infiltrarse en la compañía del mencionado Goddard y actuar como espía industrial. Adam, huelga decirlo, acepta y logra ascender rápidamente, lo que le permite descubrir que adora la ropa de marca, los coches caros y tener una novia mona. «El poder del dinero» transcurre con más pena que gloria mientras Adam sufre una nueva metamorfosis y cae en su error. No hay sorpresas aunque el cineasta se empeñe en que nos encontramos frente a una crítica a la rapiña de los grandes y amorales ejecutivos y tampoco desde el punto de vista de la interpretación es para echarse las manos a la cabeza: los dos secundarios mencionados no se parten el pecho porque saben que tampoco era necesario, mientras Hemsworth, el nuevo chico de moda hollywoodiense, ratifica que tiene un tipo espléndido y que todavía le quedan por pisar bastantes platós. Lo que a las ya cientos de admiradoras que tiene les importará un pimiento. Loquitas, a ellas sí, las tiene este chico.