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Astronomía
Julio promete ser el mes más espectacular para observar el cielo: de las Delta Acuáridas al Triángulo de Verano
Saturno y Júpiter serán perfectamente visibles y se producirá la conocida como Luna de Ciervo
Julio se presenta como un mes ideal para los amantes de la astronomía, con condiciones meteorológicas muy buenas para la observación astronómica. Desde la lluvia de estrellas Delta Acuáridas hasta la posición perfecta de Saturno y Júpiter, pasando por el Triángulo de Verano y la Luna de Ciervo, el cielo nocturno de este comienzo del verano promete ser un espectáculo impresionante.
Así, el calendario lunar de julio tendrá la luna nueva el 6 de julio a las 00:57 horas, seguida del cuarto creciente el 14 de julio a las 00:49 horas. La luna llena, conocida como la Luna de Ciervo, se producirá el 21 de julio a las 12:17 horas, y finalmente, el cuarto menguante será el 28 de julio a las 04:51 horas.
Cómo ver la lluvia de estrellas Delta Acuáridas
Uno de los eventos astronómicos más esperados de julio es la lluvia de estrellas Delta Acuáridas, resultado de los fragmentos del cometa 96P/Machholz entrando en la atmósfera terrestre. Este fenómeno será visible desde el 12 de julio hasta el 23 de agosto, con su punto álgido la noche del 30 al 31 de julio, según el Real Observatorio Astronómico de Madrid.
El hemisferio sur ofrece condiciones especialmente favorables para la observación de la lluvia de estrellas Delta Acuáridas. Las condiciones geográficas y la inclinación de la Tierra proporcionan una mejor visibilidad, permitiendo disfrutar de un mayor número de meteoros por hora. Este año, la escasa luz lunar que coincidirá con este evento debido al cuarto menguante de la Luna mejorará aún más las condiciones de observación.
El lugar ideal para observar este fenómeno debe ser oscuro, sin muchas fuentes de luz artificial. Desde Astronomía IGN recomiendan elegir un sitio con pocos obstáculos que bloqueen la vista, como edificios, árboles o montañas, y evitar el uso de instrumentos ópticos que restrinjan el campo de visión. Aunque las delta acuáridas parecen originarse en la constelación de Acuario, pueden verse en cualquier parte del cielo. Para una mejor observación, se sugiere mirar hacia las zonas más oscuras y en dirección opuesta a la Luna si esta está presente. Lo más práctico es recostarse y permitir que los ojos se adapten a la oscuridad.
Durante este mes, aunque no alcanzando su punto de máxima actividad en agosto, también se podrá disfrutar de las Perseidas, conocidas como "Lágrimas de San Lorenzo", un grupo de estrellas fugaces que se pueden observar en el cielo nocturno cuando nuestro planeta pasa por una zona del sistema solar por el que pasó previamente el cometa Swift-Tuttle.
El Triángulo de Verano
Desde National Geographic denominan el Triángulo de Verano como "el espectáculo astronómico de la temporada". Este asterismo (un grupo de estrellas que desde nuestra posición parece formar una figura geométrica) está compuesto por las estrellas Vega en la constelación de Lyra, Deneb en la constelación de Cygnus y Altair en la constelación de Aquila.
Vega es la estrella más brillante del triángulo y la quinta más luminosa del cielo nocturno. Deneb, aunque menos brillante a simple vista, es una de las estrellas más grandes y luminosas conocidas. Altair, notable por su proximidad a nuestro sistema solar y su rápida rotación, completa este asterismo que sirve como referencia para identificar otras estrellas y constelaciones.
Aunque estas estrellas parecen tener un brillo similar en el cielo, en realidad, están a distancias muy diferentes de la Tierra. Altair se encuentra a 16,73 años luz y Vega a 25 años luz, distancias relativamente cercanas. Sin embargo, Deneb está mucho más lejos, con estimaciones entre 1.425 y 3.200 años luz. A pesar de su gran tamaño, alrededor de 210 veces el de nuestro Sol, la gran distancia de Deneb y su grandeza hace que parezca del mismo tamaño que Altair y Vega cuando se observa desde la Tierra.
Saturno y Júpiter en oposición
Julio es un mes excepcional para observar Saturno y Júpiter. Saturno alcanzará su oposición el 20 de julio, situándose en su punto más cercano a la Tierra y completamente iluminado por el Sol. Este es el momento óptimo para observar sus icónicos anillos y lunas principales con la ayuda de un telescopio. Júpiter, el gigante del sistema solar, por su parte, será visible gran parte de la noche, mostrando sus bandas de nubes y la Gran Mancha Roja.
La luna llena de julio, conocida como la Luna de Ciervo, se producirá el 21 de julio. Este nombre proviene de las tradiciones de los antiguos nativos americanos, quienes notaron que las astas de los ciervos comenzaban a crecer a principios del verano en el hemisferio norte.
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