Todo sobre la nueva ola de calor: la amenaza de la gran dorsal africana y cuánto durará

Una nueva ola de calor, la segunda del verano, dejará durante estos días temperaturas extremas en la mayor parte del país. Se alcanzarán entre 38-43 grados en amplias zonas e incluso hasta 45 grados en puntos de Andalucía y de Aragón. El origen de esta ola de calor es una gran dorsal situada al oeste de la Península, en el entorno de Argelia, que está induciendo un flujo de componente sur en la mayor parte del territorio. "Esta masa de aire, de origen sahariano, muy cálida y seca, estará acompañada de polvo en suspensión y afectará a buena parte de la Península ", precisa en un nuevo comunicado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) "Todo ello, sumado a la estabilidad y a la alta insolación propia de estas fechas, provocará un ascenso de temperaturas en los próximos días, dando lugar a un episodio de calor", añade Meteorología.

Las temperaturas subirán de forma significativa este lunes en la Península y Baleares, salvo en puntos del nordeste y del área del Levante. Se prevén máximas por encima de lo normal de forma generalizada, superándose los 38 grados en amplias zonas del interior peninsular y de Mallorca, y los 40 grados en áreas del interior de la mitad sur peninsular e incluso podrían alcanzarse los 44 grados en el Valle del Guadalquivir. Ante esta situación, Meteorología ha activado este lunes el aviso rojo (riesgo extremo) en Andalucía por valores de 44 grados, y el nivel naranja (riesgo importante) en las comunidades de Madrid, Extremadura, Castilla-La Mancha y las Islas Baleares por valores entre los 38-42 grados.

En ese sentido, Rubén Del Campo, portavoz de la Aemet, ha alertado de que estas temperaturas tan elevadas suponen un "peligro extremo". También ha hecho hincapié en las tormentas secas que se podrían formar las próximas horas en el interior oriental de la península, con poca lluvia, pero con rachas de viento muy fuertes y aparato eléctrico. En ciudades generalmente más frescas como Ávila y León el termómetro subirá hasta los 35 grados, alrededor de 37 grados en Zamora y 38 grados en Lleida. Por el contrario, en San Sebastián, Oviedo, Santander y Pontevedra, las temperaturas diurnas máximas oscilarán entre 25 y 27 grados. El calor también incidirá con fuerza por la noche. "Podría haber noches en las que no se baje de 25 grados, las denominadas noches tórridas", precisa Del Campo. Por ejemplo, el martes la mínima será de hasta 27 grados en capitales de provincia como Almería y Málaga, 26 grados en Jaén y 25 grados en Toledo.

El martes persistirá el calor intenso en el país, aunque con algunos cambios. La Intensificación del viento del oeste y suroeste provocará un ascenso de las temperaturas en el levante peninsular y valle del Ebro, donde al igual que en Mallorca, podrían alcanzarse los 40-43 grados. Del Campo ha señalado durante la jornada, se superarán de nuevo los 35 grados de forma casi generalizada en la península y en Baleares, salvo en el Cantábrico. Las temperaturas más altas alcanzarán hasta 44-45 grados en el Valle del Guadalquivir, interior del sureste peninsular, en el este de Andalucía, en la Región de Murcia y la depresión central del Ebro, sobre todo en la provincia de Zaragoza. Las noches seguirán tórridas, hasta 25 grados, en puntos del Mediterráneo e interior de la zona centro y mitad sur. En las Canarias también se espera, a partir del martes, un episodio cálido con valores que podrían superar los 34º en amplias zonas del archipiélago, e incluso "40 grados en el sur de Gran Canaria", ha detallado el portavoz, quien además ha avanzado que el aire sahariano vendrá con polvo en suspensión y dará lugar a calima.

A partir del miércoles 12, se prevé una "bajada en el norte peninsular y en puntos de Baleares", aunque todavía continuará el ambiente "extremadamente cálido" en la mitad sur, con máximas por encima de los 40 grados en el Valle del Guadalquivir y especialmente en el sur de Andalucía y Región de Murcia, donde podrían superarse los 42-44 grados, ha avanzado Del Campo. A partir del jueves es posible que se dé por concluida la ola de calor.